El ataque ocurre cuando un vaso cerebral se ocluye, causando un infarto, o cuando un vaso se rompe, provocando un derrame cerebral, lo que puede dar como resultado importantes secuelas físicas, cognitivas y/o emocionales en un paciente. Está probado científicamente que la recuperación ante un ataque cerebral aumenta considerablemente si se recibe un tratamiento de trombolisis antes de las 4,5 horas desde el inicio de los síntomas de un ataque cerebral.
Los síntomas normalmente ocurren de forma súbita y SIEMPRE requieren atención médica inmediata.
• Pérdida de fuerza en la cara, brazo y/o pierna, especialmente en un lado de su cuerpo.
• Confusión o disminución del nivel de conciencia.
• Dificultad para hablar o comprender.
• Visión doble o pérdida de visión en uno o los dos ojos.
• Dificultad para caminar.
• Súbito e intenso dolor de cabeza.
• Náusea y/o vómitos sin causa aparente.
• Pérdida de conocimiento o convulsiones.