En cada período de su vida, las mujeres presentan distintos cambios. Por lo tanto, es conveniente que se realicen diferentes controles y exámenes oportunos.
Durante su vida, las personas experimentan cambios evolutivos que se pueden separar, en forma relativa, en varias etapas. “En la mujer, estas son más evidentes y en cada una de ellas se requiere de cuidados y controles médicos con el fin de lograr una mejor calidad de vida y evitar la aparición de enfermedades”, señala el médico ginecólogo de Clínica Las Condes, doctor Rafael Mayorga.
El profesional explica que después de la infancia, donde no hay grandes diferencias de cuidados entre niños y niñas, comienza la etapa de la adolescencia, “la cual se caracteriza por cambios físicos propios del género, como la aparición del botón mamario, del vello púbico y la menarquia, que es la primera menstruación”. Aclara que esta última marca, eventualmente, el comienzo de la vida reproductiva biológica, “no así la psicológica” y sugiere que a medida que transcurre la adolescencia, el control con ginecólogos considere evaluar si el desarrollo físico está acorde con la edad, mediante exámenes clínicos, de laboratorio y ecotomográficos pelvianos.
“En esta época, las menstruaciones tienden a ser irregulares y muchas veces dolorosas, lo que motiva a consultar”, señala. Además, si hay inquietudes sexuales, se aconseja a la paciente, previo al inicio de su vida sexual, el uso de la vacuna contra el virus papiloma humano (HPV) y se inculcan hábitos de conductas preventivas de enfermedades de transmisión sexual (ETS), como el uso de preservativo, además de la utilización de anticoncepción hormonal, la que puede ser vía oral, intravaginal, intramuscular o transdérmica.
A partir de los 20
La siguiente es la etapa comprendida entre los 20 y 40 años, “período en que la mujer vive plenamente su sexualidad y fertilidad”. En estos años, explica el doctor Mayorga, los controles con el ginecólogo deben ser periódicos, al menos anuales, para ser evaluadas clínicamente y lograr la toma del papanicolaou (PAP). “Este examen preventivo pretende pesquisar células precancerosas del cuello uterino, de manera de realizar un tratamiento a tiempo sin que se llegue al cáncer”. Por su parte, los exámenes de imágenes de la mama sólo se solicitan en caso de haber antecedentes de cáncer mamario en familiares directos o frente al hallazgo de alguna masa palpable sospechosa.
El doctor Mayorga destaca que esta es la etapa de la anticoncepción controlada y la época en que se producen la mayoría de los embarazos. “En esos casos, los controles deben ser mensuales, con evaluaciones físicas, exámenes de laboratorio y ecotomografías obstétricas periódicas, de manera de evaluar no sólo a la madre, sino también al feto, con el propósito de culminar exitosamente el proceso en el parto”.
Desde los 40
La etapa entre los 40 y 50 años tiene como característica la disminución en la incidencia de embarazos y partos, ya sea porque los índices de fertilidad disminuyen o por el temor de las parejas al riesgo potencial de las genopatías que puedan darse en los niños en gestación. “En los controles anuales, se deben agregar la mamografía y la ecotomografía mamaria, así como los exámenes de laboratorio conducentes a evaluar la aparición de algunas enfermedades metabólicas como la resistencia a la insulina, diabetes mellitus, hipertensión arterial e hipotiroidismo, entre otras”. En la segunda mitad de esta década, agrega, se inician las mediciones de las hormonas sexuales, ya que comienza a manifestarse el climaterio. “La actividad física ya es una necesidad desde el punto de vista de la salud global”, hace notar.
La etapa comprendida entre los 50 y 60 años, indica el facultativo, está marcada por el término de la vida reproductiva y la instalación del climaterio, período de tiempo que puede comprender varios años precediendo y siguiendo a la menopausia, la cual es sólo la última menstruación espontánea en la vida de la mujer. El climaterio premenopáusico se manifiesta fundamentalmente por la aparición de desórdenes en los ritmos de los ciclos menstruales, así como cambios en las características de las reglas, junto con bochornos ocasionales.
El climaterio postmenopáusico, se presenta con la desaparición de las menstruaciones y la instalación de bochornos en la mayoría de las mujeres, junto con sequedad genital y de la piel además de síntomas urinarios. “Los controles en esta etapa deben ser al menos anuales, debido a que un porcentaje de pacientes requieren ser tratadas con terapia de reemplazo hormonal (TRH). La finalidad es compensar el déficit de producción hormonal de los ovarios, así como prevenir la osteoporosis y el envejecimiento prematuro”. Al PAP, mamografía, ecotomografía mamaria y laboratorio, se agregan dos exámenes más: la densitometría ósea y la ecotomografía ginecológica. El primero se realiza “porque a esta edad se puede observar una pérdida de la masa ósea, la que, dependiendo de su severidad, se denomina osteopenia u osteoporosis. Esta puede desembocar en fracturas patológicas de columna y/o pelvis”.
La ecotomografía ginecológica por vía transvaginal o transabdominal es útil porque los genitales internos “deben ser muy bien evaluados, más aún si se utiliza TRH”.
Junto con las hormonas, se pueden suministrar antioxidantes, calcio y vitamina D e incentivar a la paciente a mantener hábitos de actividad física.
La etapa sobre los 60 años “es más tranquila desde el punto de vista de los síntomas postmenopáusicos, ya que tienden a disminuir o desaparecer, pero esto no significa que la mujer queda eximida de su responsabilidad de cuidarse con sus controles periódicos anuales”, aclara el facultativo.
En ese período, la terapia de reemplazo hormonal generalmente se ha suspendido, pero no así los demás tratamientos. “Los chequeos médicos enumerados en las etapas anteriores se mantienen”, puntualiza el médico.
En la medida de lo posible, destaca, la actividad física debe continuar junto con el estímulo de los ejercicios conducentes a desarrollar la memoria y el intelecto. “Es necesario mantener a las mujeres lo más sanas posible, sobre todo si tenemos conciencia de que las expectativas de vida siguen aumentando, en especial en ellas”, dice el doctor Rafael Mayorga.
CONTROLES Y EXÁMENES
Adolescente
• Evaluación del desarrollo.
• Vacuna contra el virus papiloma humano (HPV).
• Consejería sobre conductas preventivas ETS.
20 a 40 años
• Controles periódicos.
• Papanicolau.
• Mamografía (caso a caso).
• Controles en caso de embarazo.
40 a 50 años
• PAP, mamografía y la ecotomografía mamaria.
• Exámenes para descartar enfermedades metabólicas.
• Mediciones de las hormonas sexuales.
50 a 60 años
A los anteriores se agregan exámenes de densitometría ósea y la ecotomografía ginecológica.
Sobre 60 años
• Chequeos se mantienen.
• Se aconseja actividad física.