Que a todos les provocan vómitos, que hay que comer el doble porque se bajará de peso y que hay una hierba milagrosa que sanará, son parte de las historias que día a día los pacientes que enfrentan un tratamiento de quimioterapia deben escuchar. ¿Qué hay de cierto en ello?
Si bien el diagnóstico de cáncer de por sí es muy duro de enfrentar, hay también otra variante que hace que sea más difícil: las recomendaciones relacionadas con el tratamiento. Que hay que comer más para no adelgazar tanto, que los vómitos son incontrolables, que la pérdida del cabello es inevitable, son parte de los mitos que circulan como si fueran consejos.
La doctora Patricia Fardella, médico hematólogo del Centro Clínico del Cáncer de Clínica Las Condes, explica que los grandes mitos y verdades en cuanto a la quimioterapia están agrupados en tratamiento, estética, alimentación, vida sexual y actividad física.
TRATAMIENTO
En la actualidad, existen medicamentos nuevos que provocan menos vómitos. Aunque todavía se utilizan drogas más fuertes que pueden producirlos, éstos se evitan con medicamentos que los controlan exitosamente. Incluso, los tratamientos se clasifican según el riesgo que tienen de producir vómitos, explica la profesional. “Estos medicamentos se indican antes de comenzar con las sesiones, lo que previene de buena forma esta molesta consecuencia”, señala.
Si bien se sabe que las drogas provocan mucositis, que es la inflamación de las mucosas, asegura que con un buen aseo bucal y el uso de enjuagues tales como el agua de matico, bicarbonato o alimentos como los helados de piña, los síntomas disminuyen en forma significativa. Conclusión: No todas las quimioterapias provocan vómitos.
ESTETICA
En este punto la facultativa es enfática: “No a todos los pacientes se les cae el cabello. Depende de las drogas que esté tomando”. Hay pacientes que no tienen ningún cambio en el pelo, algunos lo pierden en forma parcial, pero no por el hecho de estar pasando por una quimioterapia la caída de éste es inminente.
Conclusión: El cabello puede no sufrir alteraciones a raíz de la quimioterapia.
ALIMENTACION
No todos los pacientes con cáncer disminuyen de peso ni necesitan una sobrealimentación. Aquí no es bueno aplicar el dicho popular “enfermo que come no muere”, ya que al fin del tratamiento pueden quedar con gran sobrepeso. Así como hay personas a las que les molesta el olor o sabor de algunos alimentos, otras pueden tener buen apetito, pero no hay que sobrealimentar al enfermo, debido a que se corre el riesgo de que los kilos ganados no se pierdan fácilmente, especialmente en tratamientos curativos. La doctora Fardella explica que hay que seguir las pautas de alimentación razonables y en relación con los gustos de cada uno, junto con las indicaciones de un nutricionista. Agrega que no es momento para seguir una dieta que cambie los estilos de vida. “La comida saludable es buena en cualquier momento de nuestra vida. No sólo cuando estamos enfermos”.
Señala también que si se puso en manos de un equipo médico, no es recomendable experimentar con otros tratamientos que no se hayan señalado. “Hay pacientes que me preguntan por el veneno del alacrán o los hongos tibetanos. Yo no los recomiendo, porque no sé qué efecto pueden tener sobre las drogas que ya están recibiendo”.
Conclusión: No todos los pacientes sometidos a quimioterapia disminuyen su peso.
VIDA SEXUAL
En este punto la especialista señala que es posible que se produzca una disminución en la libido (deseo sexual). Pero más que por el tratamiento, es por el estrés que significa llevar esta enfermedad y el tratamiento a seguir. Por eso es importante que si el paciente cuenta con una pareja, ésta la pueda contener y apoyar y que juntos superen la prueba de la patología.
Conclusión: La vida sexual puede continuar y la falta de libido no es necesariamente por la quimioterapia.
ACTIVIDAD FISICA
La doctora Fardella señala que en este punto es muy importante el sentido común. Si bien hay pacientes que han sido súper deportistas toda la vida, durante la quimioterapia es importante no sobreexigirse.
Es importante que se realicen actividades, pero no que dejen a los pacientes extenuados. “No hay que estar insistiendo en que deben tener el ánimo arriba y que para eso deben salir a realizar deportes u otra actividad física. Cada uno tiene su ritmo y es cierto que hay quimioterapias que agotan y lo único que quiere hacer la persona es descansar”, explica la facultativa.
Conclusión: el deporte es importante, pero al ritmo de cada paciente.
La doctora Fardella plantea que lo esencial es la comunicación con el médico tratante. Ante cualquier síntoma o duda, se debe contactar al especialista y así tomar las decisiones adecuadas para cada caso.
No todas las quimioterapias provocan vómitos. No todos los pacientes sometidos a quimioterapia disminuyen su peso. El deporte es importante, pero al ritmo de cada paciente.