Lo que antes se escondía como un problema vergonzoso, ahora puede ser tratado por un equipo de especialistas pionero en el mundo.
Cuantas veces hombres y mujeres, de diversas edades, pasaron por situaciones incómodas tales como incontinencia fecal o urinaria y creyeron que era algo tan vergonzoso y extraño que no merecía ser consultado a un médico. Y, además, ¿quién atendería esos problemas? Es por eso que Clínica Las Condes, junto a un grupo de especialistas, creó en 2011 un equipo de profesionales especializados en todas las patologías del piso pelviano. El grupo, liderado por el doctor Claudio Wainstein, coloproctólogo de CLC, es pionero y referente en Latinoamérica en el tratamiento multidisciplinario de estos problemas de salud.
El piso pelviano corresponde a una estructura muscular y ligamentosa que se encuentra en la parte baja de la pelvis y que conforma una especie de diafragma a través del cual pasan y se ubican estructuras como los genitales internos femeninos, como útero y vagina. También,está presente la vejiga y uretra, el recto y el ano. Asimismo, en esa zona se encuentran centros nerviosos que controlan las funciones evacuatorias y la sensibilidad dolorosa local y regional.
Los problemas más comunes corresponden a disfunciones de los distintos sistemas, como incontinencia urinaria, retención urinaria, prolapso genital -útero y vagina-, incontinencia anal, constipación, prolapso del recto y dolor pelviano crónico. Estas patologías afectan con mayor frecuencia a las mujeres, en una proporción de cuatro pacientes por cada hombre.
El doctor Claudio Wainstein explica que la ventaja que ofrece el Centro de Especialidades en Piso Pelviano (CEPP) se debe a que está conformado por diversos profesionales expertos en el tema, que son capaces de dar una visión global y una solución más completa al problema que aqueja al paciente. “Luego de evaluarlo tenemos una reunión con todos los médicos del CEPP y en conjunto definimos los caminos a seguir. Las desiciones se toman basadas en la historia del paciente, su examen físico y exámenes complementarios, de acuerdo a la opinión de todos los especialistas del CEPP”.
El facultativo destaca que muchas de las alteraciones son posibles de solucionar sin cirugía. Ahí es fundamental el trabajo de los kinesiólogos quienes, de acuerdo a la patología y tratamiento indicado, enseñan técnicas para reeducar la zona pélvica.
Lo fundamental, agrega, es que al ser un equipo multidisciplinario son varios los especialistas que colaboran en la recuperación del paciente, por lo que el tratamiento o cirugía siempre es evaluado para que no afecte otra zona del piso pelviano, algo que puede llegar a ocurrir si se evalúa en forma parcial, bajo la visión de sólo una especialidad.
4 pacientes mujeres por cada hombre presentan patologías relacionadas con el piso pelviano, lo que confirma la mayor prevalencia de estos problemas en ellas.
PRINCIPALES PROBLEMAS
Es un síntoma que se refiere al tránsito intestinal lento y poco frecuente, pero también se describe como una disminución en el peso o volumen de las deposiciones, el esfuerzo defecatorio, la sensación de evacuación incompleta o la necesidad de enemas, supositorios o laxantes para mantener cierta regularidad en la evacuación.
Se debe consultar al médico ante cualquier cambio persistente en el hábito intestinal, ya sea una disminución o aumento en la frecuencia o tamaño de las deposiciones o dificultad para evacuar. También, cuando la constipación persiste por más de tres semanas o si aparece sangre en las deposiciones.
Cuando el dolor pelviano persiste en forma continua por un período superior a seis meses y en el cual no es posible establecer la presencia de una enfermedad específica, se habla de dolor crónico. Este dolor genera a quien lo padece un intenso compromiso en todas las esferas de su vida, interfiriendo en lo laboral y lo social, su sexualidad, en la calidad del sueño y en su estado emocional.
Es la incapacidad para controlar los gases o las deposiciones líquidas o sólidas. Puede ser leve, presentándose problemas ocasionales con la continencia de los gases o severa con pérdida de control de las deposiciones sólidas. Es un problema común pero, por ser embarazoso, los pacientes rehúsan la consulta médica. Tanto la incontinencia urinaria como la fecal son problemas que aumentan con la edad.
Consiste en la pérdida involuntaria de orina. El afectado tiene una necesidad imperiosa y repentina de orinar pero es incapaz de retenerla. Los escapes pueden producirse al estornudar, reír, realizar algún esfuerzo o ejercicio físico.
El prolapso genital se produce en mujeres. Consiste en la caída de las paredes vaginales, acompañado de sus órganos vecinos. La pared vaginal anterior con la vejiga, la pared vaginal posterior con el recto y la parte alta o cúpula vaginal con el útero. Se origina por la debilidad o rotura de los tejidos que sostienen la vagina en su lugar.
Clínica Las Condes, junto a un grupo de especialistas, creó en 2011 un equipo de profesionales especializados en todas las patologías del piso pelviano.