¿Cuándo es bueno visitar a un geriatra?
13 de marzo, 2019
·Estilos de Vida
Especialistas del Centro Integral del Adulto Mayor entregan recomendaciones para esta etapa.
La rama de la medicina encargada de atender los problemas y enfermedades de los adultos mayores es la geriatría. El médico geriatra es el encargado de prevenir y manejar estas dificultades y de acompañar a la persona en todo su proceso de envejecimiento.
La
doctora Adela Herrera, geriatra de Clínica Las Condes, señala que su especialidad no sólo se encarga del aspecto médico, sino también de aspectos sicológicos y sociales que habitualmente acompañan este proceso.
¿Cuándo se recomienda ir a un geriatra?
Lo ideal, dice la doctora Herrera es que las mujeres visiten a este especialista cuando ya hayan tenido su
menopausia, y en el caso de los hombres, cuando ya estén en la edad de jubilación.
"La finalidad de ir al geriatra es para saber si lo que nos está pasando, es parte del
envejecimiento normal de uno o es algo patológico o si tiene alguna relación con algún signo de enfermedad o deterioro", dice. A su juicio, es necesario cambiar la imagen de la resignación por la adaptación a este proceso. "Lo ideal es ir al geriatra en forma precoz", insiste la especialista.
El
doctor Andrés Glasinovic, especialista en medicina familia y coordinador del proyecto del Centro Integral del Adulto Mayor (CIAM), señala que en esta etapa es importante que las personas se mantengan activas, que hagan ejercicios, tengan una buena alimentación, se hidraten de manera adecuada, sociabilicen e intenten evitar el estrés.
Según la doctora Herrera hay siete tips que los adultos mayores deben poner en práctica:
- Autoestima alto
- Optimismo en la vida
- Trabajar en lo que los hace felices
- Tener una motivación para levantarse cada día
- Nunca perder la capacidad de asombro y admiración
- Vida de pareja satisfactoria
- Vida de pareja sexual satisfactoria
De acuerdo a la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se es adulto mayor a partir de los 60 años en países subdesarrollados y desde los 65 años, en los países desarrollados.