Para algunos, dormir durante toda la noche es una batalla perdida, por lo que toman medicamentos para conciliar el sueño. Sin embargo, seguir unos simples consejos puede ayudar a dormir mejor y terminar con el indeseado insomnio.
En términos generales, por insomnio entendemos la condición de aquel que no duerme las horas requeridas para restaurar el organismo, lo que varía según la edad de la persona. Otro elemento importante es la calidad del sueño, pues a veces se alteran sus etapas. Es decir, se duerme, pero no se descansa.
Entonces, ¿cuántas horas es deseable dormir cada noche? Según los especialistas de Neurología de Clínica Las Condes, lo recomendable es dormir las horas que nos permitan sentirnos alertas y lúcidos durante el día. Si bien, la cantidad varía en cada persona, en la mayoría de los adultos fluctúa entre 6 y 8 horas.
Tome medidas simples y prácticas
Un par de medidas pueden mejorar de forma considerable el sueño perdido:
- Usar el dormitorio para dormir
Esto suena bastante obvio, pero en muchas casas no se vive así. La cama no es para ver televisión o para comerse un sándwich. Nuestro cuerpo debe reconocer ese espacio como un lugar para dormir.
- Establecer un horario de sueño
Respetar esos tiempos le permite al cuerpo regular el ritmo circadiano de sueño-vigilia, indispensable para un buen dormir. La siesta es buena cuando es de 15 a 30 minutos. Sin embargo, no hay que abusar de ella poniéndose pijama y durmiendo más de 2 horas.
- No tomar estimulantes antes de dormir
Algunos remedios antigripales y medicamentos para bajar de peso contienen sustancias estimulantes que dificultan el sueño. La clave es saber a qué hora tomar los remedios recetados por el doctor. Además, es recomendable evitar también los alimentos muy condimentados y abundantes.
- Evitar hacer ejercicio intenso antes de disponerse a dormir
No es bueno salir a correr, llegar exhausto, traspirado y tratar de dormir. Se puede hacer actividad física, pero ojalá vespertina, no nocturna.
- Prepararse para dormir
A veces se está tan cansado que no se puede dormir. Debemos llegar con sensación de cansancio, pero asociado al bienestar.
Si las medidas anteriores no resuelven el problema, se recomienda una visita a un médico que analice las características de su insomnio y determine si hay alguna patología subyacente. Lo primero, para un correcto diagnóstico, es la historia clínica del paciente, además de exámenes específicos destinados a conocer la estructura del sueño y la presencia de fenómenos anormales.
¿Cuáles son las posibles causas del insomnio?
- Estrés, ansiedad o depresión.
- Algunos antidepresivos, antihipertensivos, corticoides, antihistamínicos y medicamentos para bajar de peso.
- Uso de hipnóticos por mucho tiempo. Su uso prolongado provoca un efecto rebote, provocando insomnio.
- Enfermedades que causan dolor, como la artritis y la fibromialgia.
- Enfermedades que provocan despertares nocturnos como movimientos de las piernas, ronquidos, apneas del sueño, entre otras.