Para lograr una mejor calidad de vida y brindar los cuidados necesarios es importante trabajar en equipo con el paciente y su familia.
El manejo de todo paciente que se presenta con una
enfermedad oncológica, y no sólo de origen ginecológico, debe estar centrado en la persona como un todo y no sólo en el lugar anatómico donde se origina la enfermedad.
Desde este punto de vista, el
doctor Raimundo Correa, especialista en
ginecología oncológica y Cuidados Paliativos de Clínica Las Condes, explica que “se debe considerar la presencia del médico oncólogo tratante para el manejo específico de la enfermedad, pero también de un equipo multidisciplinario de profesionales de distintas áreas”.
Para el cuidado paliativo, médicos, enfermeras, psicólogos, nutricionistas, kinesiólogos y otros deben trabajar en equipo para evaluar todas las dimensiones del ser humano con el fin de lograr una mejor calidad de vida del paciente y su entorno.
El doctor Correa explica que esta modalidad se sugiere iniciarla precozmente con todo paciente oncológico y, así, ir evaluándolo de acuerdo a la necesidad que vaya requiriendo.
“Este enfoque multidisciplinario es realizado por lo que antiguamente se conoce como equipo de
cuidados paliativos. Dado que el nombre está asociado a mal pronóstico y falta de esperanza, es que en la actualidad se ha sugerido cambiar su denominación. Para esto, se han sugerido distintos nombres tales como ‘Unidad de Soporte Oncológico’, ‘Unidad de Cuidados Continuos’ o ‘Unidad de Cuidados Integrales’, entre otros”, agrega el especialista.
Por otro lado, agrega que esta nueva orientación se debe aplicar a todo tipo de pacientes oncológicos, pero en especial a aquéllos con enfermedades avanzadas desde el momento del diagnóstico, en donde se sabe que la probabilidad de curación es menor.
“Este enfoque ha demostrado beneficios tanto en mejoría de la calidad de vida como en reducción de intensidad de síntomas y, en menor medida, en
disminuir depresión y en
mejorar la sobreviva de las pacientes”, agrega.