En el día de su conmemoración, conoce más de este tipo de cáncer que afecta al sistema musculoesquelético y cómo puede detectarse.
Los
sarcomas son una variedad poco común de cáncer que aparece en el sistema musculoesquelético, esto quiere decir que se puede presentar en los huesos, en tejidos como los músculos o en los nervios. “Es un tipo de tumor por definición es maligno. Uno puede dividir los sarcomas en dos grandes grupos, los sarcomas óseos, que se originan en el hueso, y los sarcomas de partes blandas que se producen de estructuras fuera del hueso”, explica el
Dr. Alexander Tomic, traumatólogo y ortopedista CLC.
Ambos grupos de sarcomas son considerados poco frecuentes. Según explica el especialista, se estima que la incidencia del sarcoma de partes blandas es de 1 en 100 y en los tumores óseos es de 1 en 100 mil.
Causas del sarcoma
Existen diferentes tipos de sarcoma, pero en una gran parte de los casos, su causa puede ser debido a una alteración genética. Entre los factores de riesgo, en algunos tipos de tumores malignos, la herencia genética puede incidir en su aparición.
También podemos encontrar otros tipos de factores que pueden aumentar las probabilidades de tener un sarcoma:
- Edad.
- Exposición a radiación.
- Exposición a químicos que pueden alterar el material genético.
- Herencia genética.
Síntomas y detección
En cuanto a la sintomatología de los sarcomas, el Dr. Tomic explica: “La manifestación de los sarcomas puede ser muy variada. Pueden ser síntomas inespecíficos que son el aumento de volumen, en donde te palpes una masa que es lo más evidente. Pero a vece son más profundos y por lo tanto no son palpables y pueden avanzar de forma silente hasta que comprimen alguna estructura aledaña, causando compresiones neurológicas, vasculares, etc.”.
Otros síntomas:
- Zonas con aumento de calor local -mayor vascularización-.
- Cambios de coloración en la piel -eritema-.
- Protuberancia que se siente a través de la piel.
Es importante recalcar que la mayoría de las veces los tumores musculoesqueléticos se diagnostican como hallazgos. Es decir, el paciente se realiza un estudio de imágenes por otros motivos, un trauma menor o esguinces, y al realizar el estudio se encuentra una masa que está creciendo, teniendo o no síntomas evidentes.
Luego del examen físico y el estudio de imágenes, se hace una lista de diagnósticos posibles. Si el sarcoma no se ha descartado, se realiza la extracción de una muestra del tejido para su biopsia y confirmación de qué células está compuesta esa masa.
Tratamiento
El tratamiento dependerá del tipo de sarcoma que afecte al paciente. En su mayoría tienen cura si son diagnosticados a tiempo. Entre los tratamientos pueden efectuarse radioterapia, quimioterapia o una combinación entre uno de esos dos y cirugía.
Derribando mitos sobre el sarcoma
El Dr. Alexander Tomic nos aclara las principales dudas sobre este tema:
- ¿Todos los tumores son sarcomas?: No. Los tumores son masas anormales de tejido y se diferencian entre benignos -no cancerosos- y malignos - cancerosos-. Cuando se habla de sarcoma, se refiere a que un es un tipo de tumor maligno.
- ¿El sarcoma es grave en todos los casos? El pronóstico depende de diversos factores: el tipo de células que lo componen, el grado de malignidad y por último la capacidad de metastatizar del sarcoma -llegar a otras zonas del organismo-.