Las patologías que pueden afectar a la garganta pueden ser muy diversas. Conoce a continuación algunas de ellas y a qué señales hay que estar alerta.
Con la ayuda del
doctor Andrés Lanas, otorrinolaringólogo de Clínica Las Condes y Centros Médicos Chicureo y Peñalolén, y de
la doctora Pilar Gajardo, otorrinolaringóloga de Clínica Las Condes y Centro Médico Peñalolén, se detallan algunas de las condiciones que pueden afectar a la garganta, sus síntomas y tratamientos.
1. Amigdalitis y faringitis recurrentes
La principal causa de
amigdalitis y faringitis recurrente son las infecciones virales. Se presenta generalmente con dolor al tragar y fiebre elevada. En niños, se considera normal hasta 7 infecciones de este tipo al año.
La mayoría de estas infecciones son autolimitadas y se tratan con analgésicos de vía oral. La indicación de
amigdalectomía se considera cuando un niño tiene
amigdalitis bacteriana a repetición, la cual debe ser confirmada mediante cultivo o test rápido faríngeo. Las amigdalitis bacterianas son más frecuentes entre niños de 5 a 15 años de edad.
2. Lesiones en las cuerdas vocales y alteraciones de la voz
En este caso, hay que preocuparse frente a una
disfonía (cambio en la calidad de nuestra voz habitual) que dure más de 15 días. Las alteraciones de la voz relacionadas a cuadros respiratorios virales o bacterianos, en general, se resuelven en períodos menores a 2 semanas.
Por otro lado, si presentan alteraciones o problemas de la voz de corta duración (menos de 14 días), pero que se repiten o recurren a lo largo del año, también se sugiere consultar con un especialista.
En
personas que usan su voz laboralmente, si bien pueden no presentar alteración de la voz, muchas veces se quejan de fatiga o cansancio vocal hacia el fin del día o la semana; sensación de que deben hacer más esfuerzo para a hablar. Estas molestias también pueden estar indicando que algo no anda bien a nivel de las
cuerdas vocales.
3. Disfagia o problemas para deglutir
Disfagia es el término utilizado para referirse a los trastornos o problemas al momento de alimentarse, de comer y tragar o deglutir el alimento. Según su manifestación, existen dos tipos y ambas situaciones deben ser evaluadas por un médico.
- Disfagia lógica: Cuando el paciente va presentando problemas progresivos para tragar, empezando con los sólidos y aumentado hacia alimentos cada vez más blandos o líquidos.
- Disfagia Ilógica: Se refiere a aquellas molestias que no presentan un patrón claro en relación a las consistencias y evolución en el tiempo; puede ser para líquidos y no sólidos. Pueden cambiar los alimentos que le producen dificultad al paciente, muchas veces, con períodos alternados de normalidad o aparente mejoría.
Las causas pueden ser diversas:
- Enfermedades neurológicas centrales.
- Accidentes cerebrovasculares.
- Problemas a nivel de la laringe (parálisis de una cuerda vocal, por ejemplo).
- Cambios propios de la edad que pueden aumentar el riesgo de neumonía aspirativa.
- Cirugías de Cabeza y cuello que pueden modificar la anatomía y/o alterar la inervación de la zona.
- Trastornos en la motilidad de la faringe-esófago.
- Estrecheces esofágicas, entre otras.
El tratamiento dependerá de la causa que produzca la disfagia. En general, son pacientes que requieren un manejo por equipo multidisciplinario, donde el trabajo mancomunado de otorrinolaringólogo y fonoaudiólogo es fundamental.
4. Crup
El
crup o laringitis aguda es la infección de la laringe por el
virus parainfluenza. Es más frecuente en los niños pequeños, dado que su vía aérea es de menor diámetro, por lo que al inflamarse se achica más aún y da los síntomas clásicos de dificultad respiratoria y estridor.
Dado lo anterior, si el paciente presenta esta dificultad para respirar sí requiere tratamiento, siendo lo más utilizado la administración de corticoides para desinflamar la vía aérea.
5. Anquiloglosia o frenillo corto
El
frenillo sublingual corto es una alteración congénita cuyo síntoma principal es la dificultad para amamantar, lo cual puede causar una lactancia dolorosa para la madre.
Si esto ocurre la recomendación es realizar una sección del frenillo sublingual lo antes posible para facilitar la alimentación del recién nacido y evitar problemas con la lactancia materna.
Esta sección del frenillo sublingual en niños pequeños se puede hacer en la consulta otorrinolaringológica y sus resultados son inmediatos. En los niños más grandes, tener el frenillo sublingual corto puede causar dificultad para pronunciar algunos fonemas, siendo esta otra indicación de cirugía. En los niños más grandes, la cirugía debe hacerse en pabellón.
6. Insuficiencia velofaríngea
La insuficiencia velofaríngea es el cierre incompleto de un esfínter entre la
bucofaringe y la
nasofaringe. Esto se produce generalmente por alguna falla en el paladar y se caracteriza por causar voz hipernasal.
En los niños que presentan un cierre incompleto del
esfínter velofaríngeo, lo más importante es el trabajo en equipo otorrinolaringología, fonoaudiología y cirugía plástica.
Es fundamental definir las causas y severidad de esta condición, ya que según esto es que decide si el paciente es candidato a mejorar su insuficiencia velofaríngea con tratamiento fonoaudiológico, o, en los casos más severos necesitará de una cirugía para corregir este mal cierre.
7. Sialorrea o babeo
Existen diferentes causas de
exceso de salivación en los niños, siendo más frecuente esta condición en pacientes con parálisis cerebral. Esto puede tener un gran impacto en la salud dental e incluso causar enfermedades pulmonares a largo plazo.
La
sialorrea debe tratarse para prevenir esto. Existe la posibilidad de tratarla con medicamentos como el
glicopirrolato, inyección de
toxina botulínica A en las
glándulas salivales y en los casos más severos se pueden ligar los conductos de las glándulas que producen la saliva para mejorar esta condición.
8. Apnea obstructiva del sueño
La
apnea del sueño es una patología que afecta a más del 5% de la población y conlleva importantes consecuencias físicas, psíquicas y emocionales.
Esta alteración se origina cuando los músculos que sostienen los tejidos blandos en la garganta, como la lengua y el paladar blando, se relajan de forma temporal, estrechándose y dificultando así el flujo respiratorio, agitando las paredes de la vía aérea y produciendo el ronquido.
En los niños, la principal causa de apnea del sueño es la hipertrofia de
adenoides y amígdalas. Tratar esta patología permitirá una mejor calidad de vida para el paciente y evitará las secuelas de la
hipooxigención cerebral prolongada.
El síndrome de apnea e
hipoapnea del sueño puede causar problemas neuroconductuales en los niños que la padecen, tales como trastorno por déficit de atención e hiperactividad, con impacto en el aprendizaje y sociabilidad.