Reducir las horas de piscina ayuda a prevenir las otitis
07 de febrero, 2017
·Niños
Las otitis externas son más frecuentes en la época de verano. ¿La razón? Durante el verano se incrementa el uso de la piscina.
Según el doctor Luis Cabezas, otorrino de Clínica Las Condes, “no es tanto por bañarse en la playa o en los ríos. El agua de las piscinas está más contaminada y por lo tanto los oídos están más expuestos a gérmenes”, dice el especialista.
Mucho tiempo en el agua, quita la protección natural del oído, el cerumen, y por lo tanto el riesgo de una infección en el oído externo es mayor.
“Lo más importante de este tipo de otitis es la prevención. ¿Qué se puede hacer? Reducir el uso de la piscina. Evitar que el niño pase muchas horas en el agua”, señala el otorrino.
En segundo término, el doctor Cabezas recomienda que al concluir la jornada de piscina se realice una buena limpieza de la parte externa del oído, pero sin utilizar cotonitos. “Lo que predispone a la infección es la humedad en el oído. No se recomienda el uso de cotonitos porque barre con la capa de cerumen y ésta tiene propiedades antibióticas”, señala el doctor.
Síntomas de la otitis de verano
El principal síntoma de este tipo de otitis es el dolor. “El oído está formado por cartílago y eso no da mucho espacio para expandirse y con la otitis la zona se inflama. Eso duele mucho”, indica el especialista. Otro síntoma que refieren los niños es la sensación de oído tapado.
En general, el oído se defiende bastante bien de las otitis, dice el doctor Cabezas. “Millones de personas se bañan en piscinas y son pocas a las que les da otitis”, agrega.
Tratamiento
Cuando se genera una otitis externa, en general el tratamiento son gotas antibióticas que se indican como tres o cuatro días. “Sin embargo, hay otitis externas que pueden ser mucho más severas dependiendo de la agresividad del germen o del mecanismo de defensa que tenga cada individuo con respecto a esos gérmenes”, recalca el otorrinolaringólgo.