Consumo de alcohol y drogas en adolescentes: cinco factores protectores
07 de febrero, 2018
·Niños
Pasar tiempo en familia y mantener reglas claras son parte de ellos.
La prevención es clave si lo que buscas es evitar que tus hijos adolescentes y jóvenes consuman alcohol y drogas. Para ellos, dice el doctor Elías Arab, psiquiatra infantil de Clínica Las Condes, es necesario fomentar y mantener ciertos hábitos. “En los adolescentes el objetivo debe ser consumo cero”, dice este especialista.
- El principal factor protector es pasar tiempo en familia.
Tener buena relación con los padres y disfrutar estando juntos. El diálogo, los vínculos, las relaciones familiares y la práctica de deporte ayudan a retrasar al máximo el inicio del consumo. Tener al menos una comida al día todos juntos para compartir y conversar es primordial.
- Reglas claras.
Los padres deben tener posturas claras y consistentes en relación a que los adolescentes no deben consumir alcohol, así como supervisar que ello no ocurra. “No estás autorizado para beber ni fumar marihuana”, ese es el mensaje que debe estar claro. Si no se logra, hay que tomar medidas mayores por que el riesgo de adicción va en aumento.
- Más naturaleza y deportes.
Salir a caminar, practicar alguna actividad física o simplemente observar el entorno al aire libre hace que los jóvenes se desconecten de las pantallas y mejoren su salud física y mental. Además, el deporte favorece la concentración, el trabajo en equipo, permite sociabilizar y sirve como regulador emocional, entre otros.
- Dormir lo suficiente.
A menos horas de sueño, menos concentración, más irritabilidad y falta de energía. Esto se traduce también en una disminución del rendimiento académico y desmotivación, que puede hacer que los jóvenes busquen compensar por otro lado.
- Menos estrés.
Un poco de adrenalina no es malo, pero llegar al límite del estrés nunca es positivo.