Inmovilizarlo es clave en los primeros momentos, mientras concurres a un especialista lo antes posible.
En época de vacaciones y con el aumento de actividades al aire libre, también aumentan las probabilidades de
accidentes, para los que debes estar preparado(a) y reaccionar a tiempo.
En el caso de la
fractura de tobillo, lesiones dolorosas, con aumento de volumen y ocasionalmente equimosis (moretón) en la zona, los especialistas indican que lo primero que hay que hacer es
inmovilizar rápidamente con un método como una férula o tablilla o una bota plástica removible. “Mucha gente dispone en sus casas de botas plásticas inmovilizadoras o simplemente algún tipo de
entablillado, un tipo de férula que hay en centros deportivos, que protegen el tobillo, lo inmovilizan, de alguna manera, para proteger de lesiones.
Posteriormente hay que trasladarlo a un
servicio de urgencia, donde se debe hacer un estudio radiológico para confirmar el diagnóstico o descartarlo y obviamente manejarlo en forma adecuada”, indican los especialistas.
Las
fracturas se dividen en dos grandes grupos: si hay
desplazamiento del hueso o si el hueso queda en su lugar. “Si el hueso está armado es la situación ideal, como es natural se puede corregir de forma ortopédica, con botas inmovilizadoras, yeso o cosas similares, pero si es desplazado debe ser operado para restituir la forma natural del hueso y tener una función normal”, explican.
La
recuperación en cualquier caso
tarda alrededor de 3 meses, luego de los cuales se puede volver a retomar las actividades previas sin problemas, porque no debería dejar secuelas. Tanto post
cirugía como al terminar el periodo inmovilizados se necesita kinesioterapia.
Tampoco requiere un mayor cuidado post alta, ya que cuando un hueso cicatriza después de una fractura incluso es más fuerte, por lo que es raro que se quiebre de nuevo.