Los implantes mamarios son una de las herramientas más utilizadas en cirugía plástica y su utilidad es transversal para la estética como para la cirugía reconstructiva.
En cuanto a la indicación estética, se consideran los casos de mujeres con poco desarrollo mamario y para lograr aumento y reposicionamiento de la mama en pacientes con mamas caídas producto de embarazos o bajas de peso importantes.
En términos de reconstrucción se indica cuando se busca la simetría en pacientes con mamas de tamaño y forma diferentes o para pacientes que han perdido sus mamas producto de una cirugía para el tratamiento del cáncer de glándula mamaria.
Este requerimiento requiere de varias consideraciones que debes tener en cuenta antes de tomar la decisión:
- Tener un desarrollo mamario completo
- Contar con evaluación médica del especialista
- Tener sus patologías asociadas estabilizadas
- Descartar cualquier patología mamaria activa mediante ecografía mamaria y/o mamografía.
- No fumar o haber suspendido el hábito 3 semanas antes del procedimiento.
- Suspender medicamentos que alteren la coagulación (aspirinas, por ejemplo).
Una mujer que se somete a un implante mamario debe tener control con su médico una vez al año, como parte de su evaluación mamaria de rutina. Los implantes, no tienen una vida útil determinada pero las propias empresas sugieren que deben ser reemplazados cada 10 años.