¿Los meses de encierro pueden traer consecuencias para las guaguas que han nacido en época de COVID-19? Conócelo a continuación.
El
doctor Hernán Villalón, neonatólogo de Clínica Las Condes, asegura que uno de los principales efectos para aquellas guaguas que han estado sin salir, y sin ver a personas más allá de su familia nuclear, es la falta de
estimulación.
“Ver colores, formas, figuras y personas. Los principales aspectos del lenguaje y comunicación, tienen que ver con la interacción con otras personas, por lo que es posible que al salir del desconfinamiento sí necesiten tiempo para adaptarse, acostumbrarse a estar con más gente y a nuevos estímulos.”, señala.
En este sentido, agrega que “a un
recién nacido y a los niños pequeños hay que cuidarlos mucho. Si bien es cierto que no se ha visto que sean particularmente de riesgo, hay muchas cosas que aún no se sabe del
COVID-19, por lo que la recomendación es cuidarlo como a cualquier persona
inmunoincompetente”.
Por lo anterior, el especialista aconseja que, hasta que la pandemia no se controle completamente, es conveniente evitar la sobrexposición de los niños, sin olvidar que son múltiples las cosas que los papás pueden realizar en casa para estimularlos en casa.
Si bien plantea que los recién nacidos no necesitan una estimulación que requiera tanto contacto con otras personas, para los lactantes mayores de 3 meses y niños una forma de ayudarlos es:
- Contactarlos con otras personas de la familia en forma telemática; por ejemplo, Abuelos, tíos, y otras personas que pudieran estar en la red familiar como amigos cercanos.
- Pasearlos en espacios abiertos, sin contacto directo con otras personas, pero que vean colores, formas y naturaleza.
Lo que hay que sabe con un recién nacido en casa
El doctor Hernán Villalón aprovecha también a continuación de dar algunas recomendaciones para cuando los recién nacidos llegan al hogar.
Asegura que lo primero que hay que saber es que el recién nacido es
absolutamente dependiente. No tiene cómo autorregularse y autosatisfacer sus necesidades.
“Hay que estar completamente pendientes. Esto va desde la temperatura, las posiciones para dormir, la alimentación, la limpieza y estar atentos a sus necesidades, sin olvidarse de que los niños tienen lenguaje binario, es decir, cada vez que llora va a ser para manifestar una necesidad”, indica.
Complementa afirmando que “a esa edad, ya sea en el caso de los prematuros como en los niños de término, no existe el niño manipulador, el malcriado”.
También es importante saber:
- El rango térmico para que un niño vestido, o eventualmente tapado, esté cómo es entre 18-20º.
- Los niños deben dormir de espaldas con la cabecera levantada sobre un colchón firme, idealmente de una tela impermeable y sin nada mullido (almohadas, cojines).
- Es importante mantener contacto frecuente con el neonatólogo.
¿Cuándo hay que llevar a un recién nacido al servicio de Urgencia?
El neonatólogo detalla que hay ciertos hitos que deben motivar una consulta inmediata al
servicio de Urgencia en el caso de los recién nacidos:
- Fiebre sobre los 37º.
- Rechazo de alimentación.
- Letargo prolongado.
- Infecciones respiratorias o digestivas.