Espirometría Basal y Post Broncodilatador

La espirometría es fundamental para evaluar las aleteraciones respiratorias en el niño y su seguimiento en el tiempo.

Mide el volumen del aire que el paciente es capaz de movilizar en una inspiración y espiración forzada en un tiempo determinado. El estudio de estos volúmenes en el tiempo permite calcular los flujos espiratorios y determinar si existe alguna limitación en la ventilación pulmonar, la que puede ser por obstrucción de las vías aéreas, por restricción para expandir los pulmones o ambos.

En niños se prefiere realizar esta prueba pre y post salbutamol, con fin de evaluar la respuesta broncodilatadora. Para ello es necesario abstenerse de usar los broncodilatadores de acción corta (salbutamol) 8 horas antes del examen y los de acción prolongada (salmeterol, formoterol) 24 horas antes.

Este procedimiento requiere de la colaboración del niño, pero con personal capacitado en pacientes pediátricos es posible lograr buenos resultados incluso desde la edad preescolar, lo que que aportará gran información para el diagnóstico diferencial y manejo de la enfermedad que se esté estudiando.

Curva Flujo Volumen

En este examen, que se realiza de la misma forma que la espirometría, se miden flujos en diferentes tiempos de la respiración, dibujándose una curva del ciclo respiratorio, lo que permite determinar a que nivel de la vía aérea se produce la obstrucción al flujo de aire.

También requiere de la suspensión de broncodilatadores previo a la prueba.

Oscilometría de Impulso (IOS)

La oscilometría de impulso mide la resistencia de la vía aérea a través de un equipo que analiza la presión transmitida al árbol bronquial desde un generador externo y de una fuente productora de flujo de aire constante.

Este examen es muy útil en niños pequeños ya que el paciente debe respirar tranquilamente a volumen corriente, presionando levemente las mejillas con las manos, y no requiere de mucha colaboración por parte del paciente. Requiere de la suspensión del broncodilatador previo a la prueba.

Es más sensible que la espirometría para detectar patología obstructiva y permite evaluar muy bien la respuesta broncodilatadora, que será útil en el diagnóstico diferencial y seguimiento de los pacientes.

Test de Ejercicios

La provocación bronquial inducida por el ejercicio es un test muy útil en pediatría ya que si existe obstrucción bronquial después de correr durante 6 minutos en una trotadora, es de gran ayuda al diagnóstico de asma bronquial en el niño.

Saturometría Continua de Oxígeno

La saturometría u oximetría nocturna de oxígeno consiste en medir la saturación de oxígeno en la sangre durante toda la noche. Para esto se utiliza un oxímetro de pulso que mide la saturación cada 2 segundos mediante un sensor infrarojo que se fija en el dedo índice del paciente. En este examen se busca detectar caídas de la saturación de oxígeno que permitan sospechar alteraciones de la ventilación durante el sueño en pacientes respiratorios crónicos. También es de utilidad en el estudio del niño roncador o apneas. Este examen puede realizarse en forma ambulatoria o en paciente hospitalizado.