Fármaco puede generar una dependencia psicológica.
No son pocos los hombres que sin necesitarlo recurren a una
pastilla de sildenafil para tener un
mejor rendimiento sexual, pero no hay nada más alejado de la realidad.
Este medicamento está indicado para la
disfunción eréctil, es decir, para hombres que no pueden alcanzar o mantener una erección prolongada para mantener una relación sexual.
El
doctor Cristian Palma, urólogo y andrólogo de Clínica Las Condes, explica que un exceso de sildenafil puede generar una dependencia psicológica lo que lleva a los hombres a sentir inseguridad si no toma la pastilla antes de la actividad sexual.
“El sildenafil es un fármaco muy seguro. Sólo se piden exámenes antes de su indicación si existe alguna posibilidad de que el paciente tenga alguna enfermedad no diagnosticada como por ejemplo diabetes o
bajos niveles de testosterona”, señala el especialista.
El sildenafil salió al mercado en el año 1998 y representó una verdadera revolución en el mundo de la urología ya que pasó a convertirse en el tratamiento de primera línea para los varones que tienen disfunción eréctil. No ayuda a aumentar el deseo sexual.
¿Y si lo usa alguien que no lo necesita? Desde el punto de vista físico, se trata de un
fármaco muy seguro, dice el doctor Palma, por lo que la posibilidad de tener algún problema médico por el uso de sildenafil es mínimo.
Por otro lado, es necesario mencionar que productos de los que no se tienen análisis pueden producir daño hepático, renal y metabólico en general.