En el marco de la contingencia sanitaria por Covid-19, los centros hospitalarios de país se han constituido como una Red Integrada de Salud para hacer frente a esta pandemia.
Carlos Valenzuela (58)
fue trasladado a Clínica Las Condes desde la Posta Central, luego de presentar una complicación respiratoria severa, fue
conectado a ECMO y trasladado a la Clínica en estado crítico y riesgo vital, donde estaría 72 días hospitalizado por Coronavirus.
“Desde el punto de vista de la motricidad, las personas que han estado hospitalizadas, intubadas y conectadas a ECMO, quedan muy debilitadas en su capacidad física, tanto a nivel muscular como cardiovascular, debido a la inflamación que ha sufrido su cuerpo y a los fármacos que han sido necesario para contrarrestarla”, sostiene
Felipe Zúñiga, uno de los kinesiólogos encargado de su recuperación.
Esta debilidad se expresa en una dificultad para realizar tareas básicas, como sentarse e incluso mantenerse de pie por más de 5 segundos. Luego del alta, Felipe añade que estos pacientes se van con una guía de ejercicios, pero después ellos deben seguir haciendo actividad física
, “inicialmente todos los días para después seguir, ojalá, 2 a 3 veces por semana”, puntualiza.
Luego de sufrir una importante pérdida de masa muscular, debido a la disminución de peso que perdió por la cantidad de días en ventilación mecánica, el paciente oriundo de San Bernardo tuvo que iniciar una serie de tratamientos, donde aprender a realizar las tareas cotidianas de manera independiente, sería el mayor de sus desafíos.
El staff de médicos tratantes, expresa que en el paciente se ha realizado una “rehabilitación intensiva”.
“Como equipo médico, fuimos paso a paso. Luego de extraer la cánula de traqueotomía, comenzó el proceso de enseñarle a hablar y comer. Además, iniciar su proceso de movilidad, puesto era un paciente que no se podía sentar y que no tenía movilidad de tronco”, comentan.
Además, en el caso de Carlos fue fundamental la labor del
equipo clínico multidisciplinario conformado por intensivistas, kinesiólogos, fonoaudiólogos, enfermeras, terapeuta ocupacional, nutricionista, psiquiatra y médico broncopulmonar. De acuerdo con los especialistas trabajar en red supone un seguimiento en el tratamiento del paciente para que una vez que retorne a su hogar, continúe con la evolución esperada hasta completar su alta médica.
“Con el paciente se hizo una exhaustiva adecuación de recomendaciones médicas para que prolongue así el tratamiento en su casa. Para este caso, optamos por el sistema de hospitalización intradomiciliaria en soporte kinésico, debido a la gran pérdida de masa muscular que presentó”, puntualizan los doctores.
Una nueva oportunidad de vida
Carlos Valenzuela se desempeñaba como constructor de obra gruesa. Fue cuando desempeñaba faenas en La Serena que comenzó con síntomas de Covid
-19, como dolor muscular, fiebre e insuficiencia respiratoria.
Luego, pasaron casi 3 meses, hasta el viernes 17 de julio, cuando pudo regresar a su casa, junto a su familia, y empezar así a construir nuevamente una rutina normal, no exenta de cuidados y recomendaciones para lograr su alta completa.
“En su casa, el proceso de rehabilitación debe continuar. En este escenario, el paciente se enfrenta con barreras y dificultades, muchas veces de costo emocional, que antes podían sortear, pero que hoy les va a costar sobrellevar. Entonces el apoyo de kinesiología y psicología en la casa es fundamental”, añade María José Etchebarne, terapeuta ocupacional.
Por su parte, Carlos Valenzuela expresa que tiene ganas de hacer y retomar diferentes actividades que no pudo hacer antes.
En este sentido, “quiero aprovechar esta segunda oportunidad que me dio la vida, para disfrutar más a mi familia, a mis 4 hijos y 5 nietos que no veo desde hace más de 2 meses. Estoy muy agradecido del equipo de la Clínica Las Condes, quienes me ayudaron a volver a mi casa”, detalla.