Si bien las dermatomicosis en la piel no son graves y son un problema muy común, sus síntomas pueden ser incómodos para los pacientes que las padecen. Conoce cómo se producen y cómo prevenirlas.
El
calor, la
humedad, el uso de piscinas e instalaciones deportivas favorecen el desarrollo de las
infecciones fúngicas en la época de
verano. Las más comunes son las
dermatomicosis superficiales, que corresponden a infecciones de las capas superficiales de la
piel -epidermis-, uñas y pelos causadas por
hongos.
En este sentido, es importante señalar que sólo el 0.1% de las especies conocidas de
hongos son capaces de producir
micosis en el ser humano, generando
infecciones; es decir la mayoría de ellos viven en la superficie de nuestra piel en armonía con otros microorganismos que forman parte de nuestra
flora cutánea normal, sin causar ninguna enfermedad. Sin embargo, cuando este equilibrio es alterado, se pueden producir diferentes patologías a causa de estos
hongos.
-
- En determinadas situaciones ciertos hongos pueden comportarse como patógenos produciendo una infección; y esto se ve favorecido por condiciones propias del hongo como su capacidad de agresividad e invasión en piel, pelo o uñas; asociado a condiciones del ser humano que pueden favorecen la invasión, como el calor y exceso de humedad que facilitan su crecimiento”, explica el equipo de dermatología de CLC.
Infecciones por hongos en la piel más comunes en verano
- Pitiriasis versicolor: afecta principalmente a la piel del tronco posterior o anterior -aunque pueden existir casos de mayor extensión-. Este hongo afecta la pigmentación normal de la piel, lo que da lugar a la formación de pequeñas manchas decoloradas. Esas manchas pueden tener un color más claro u oscuro que el de la piel que las rodea.
- Micosis de pliegues corporales: Afecta a las áreas de la piel que forman los pliegues cutáneos -axilar, inguinal, mamario, submamario o interglúteo-. Se originan lesiones como placas eritematosas, con pústulas y/o vesículas que presentan descamación y prurito (picor) en el área afectada.
- Tiña pedis o pie de atleta: Suele ocurrir en personas con sudor excesivo en los pies. Los signos y síntomas de pie de atleta incluyen descamación, picor, y en ocasiones una erupción pustular, micro vesicular o fisuras entre los dedos de los pies. La afección es contagiosa y puede transmitirse a través del contacto directo piel a piel, y algunos elementos contaminados como toallas y superficies que permanecen húmedas en baños o piscinas temperadas.
Tratamiento
Los expertos indican que se debe consultar al
dermatólogo cuando se observe la presencia de áreas de piel con
cambios de coloración -claros, oscuros o rosados- en tronco o extremidades,
placas descamativas con o sin picor, o en la
forma de las uñas, ya que estos síntomas sugieren una
infección en la piel por
hongos.
El tratamiento dependerá del área corporal afectada, tipo de
hongo y superficie comprometida por la infección; así como las condiciones de salud del paciente que pueden limitar algunas terapias. Los tratamientos pueden ser
tópicos como
cremas o lociones con antifúngicos o fármacos antifúngicos vía oral.
En cuanto a las consecuencias de no tratar estas patologías, los expertos agregan: “en un paciente sin alteración del sistema inmune se comportan como entidades benignas, sin riesgo de afectar la vida de la persona. Sin embargo, pueden comprometer una gran superficie cutánea, causar deterioro en la calidad de vida por cambios en el aspecto de la piel y picor. También pueden aumentar el riesgo de sobreinfección bacteriana si se daña la
piel producto del trauma del rascado que altera la función de barrera cutánea; y por último, alteraciones de la estructura y forma del tejido como ocurre en las infecciones de las uñas”.
¿Cómo prevenir las infecciones por hongos en la piel durante el verano?
- Evitar la humedad prolongada: evitar ropa ajustada o telas que favorezcan la sudoración (preferir ropa suelta de algodón), cambiar la ropa sudada precozmente, mantener la piel seca (especialmente planta de pies, áreas entre los dedos de pies, así como los pliegues corporales).
- Mantener buena higiene corporal y secar bien la piel posterior al baño.
- No utilizar cremas con corticoides automedicadas en zonas que podrían estar infectadas por hongos.
- En el caso de la tiña corporis, evitar manipular zonas con infección por hongos y lavar las manos luego de la manipulación esa zona, para no transportar el micro organismo a otros sitios corporales.
- Mantener en control médico enfermedades que deterioren la inmunidad como diabetes, VIH, y aquellos con enfermedades que requieran uso de fármacos inmunosupresores.