Gastroplastía endoscópica: la pieza del puzzle que faltaba
03 de septiembre, 2018
·Tratamiento y Recuperación
Procedimiento para bajar de peso es una herramienta intermedia entre el balón intragástrico y la cirugía bariátrica.
La gastroplastía endoscópica es un nuevo tipo de procedimiento endoscópico que se realiza como tratamiento contra la obesidad a través de la boca reduciendo el volumen gástrico con puntos.
“Es una técnica mínimamente invasiva, no tiene incisiones, por lo que no es considerada una cirugía. Además, es de rápida recuperación. Es la pieza del rompecabezas que faltaba entre un balón gástrico y una cirugía bariátrica”, así lo define el doctor Marcos Berry, cirujano digestivo del Centro de Nutrición y Bariátrica de Clínica Las Condes.
Este procedimiento, explica el especialista, está indicado para personas que tienen un Índice de Masa Corporal (IMC) mayor de 28 y que tenga otras enfermedades asociadas. “También se recomienda a paciente en tratamientos convencionales para bajar de peso con medicamentos y resultados insuficientes, pero que tienen el compromiso de adoptar estilos de vida saludables, apoyado por un equipo multidisciplinario”, agrega.
“Por otro lado, también está indicado para personas con un IMC superior a 35 y que no desean someterse a una cirugía bariátrica, además de pacientes que, tras una cirugía bariátrica, hayan tenido reganancia de peso. Esto último, está en evaluación”, dice el cirujano.
La intervención dura una hora y se realiza con anestesia general. Tras el procedimiento, el paciente debe permanecer una noche en la clínica.
Respecto de los cuidados post cirugía, el doctor Berry dice que es necesario comer papillas al inicio: líquidos y lácteos durante la primera semana, papillas durante la segunda y luego ir incorporando sólidos. La actividad física se puede retomar a la segunda semana, comenzando primero por actividad aeróbica y luego, a partir de la cuarta semana, “full gimnasio”.
En promedio, una persona baja 15 kilos en 6 meses. Durante el primer mes entre 5 o 6 kilos dependiendo del peso al inicio del procedimiento. “Es importante mantener un control estricto por equipo multidisciplinario, al igual que una cirugía bariátrica. El primero es a los 10 días, luego al mes, a los tres meses, a los seis meses y al año post procedimiento. Después de eso, el control debe ser cada seis meses”, indica el doctor Berry.
Cabe mencionar que ante síntomas como fiebre, dolor abdominal intenso y vómitos persistentes, se debe consultar con el médico.