¿Se puede prevenir la diabetes tipo 2?
03 de septiembre, 2020
·Tratamiento y Recuperación
La diabetes tipo 2 es una enfermedad multifactorial, en la que influye mucho el estilo de vida, la dieta y la actividad física. Conoce más sobre cómo prevenirla a continuación.
Si bien existe un componente genético que hace a algunas personas más susceptibles a desarrollar la
diabetes tipo 2, la
doctora Karina Elgueta, diabetóloga de Clínica Las Condes y Centros Médicos
Chicureo y
Peñalolén, asegura que si mantenemos un estilo de vida saludable, con alimentación adecuada, realizando ejercicio en forma regular, con un buen control del peso, su aparición sí se puede prevenir o retrasar.
Diferente es la situación de la
diabetes tipo 1, que es una condición autoinmune, en la que se produce destrucción de las células encargadas de producir insulina en el páncreas y en la que no está claro por qué esto se produce ni sus gatillantes, por lo tanto, no es prevenible.
¿Cuáles son los factores de riesgo para desarrollar la diabetes tipo 2?
Los principales factores de riesgo son:
“Es muy importante estar alerta a estos signos para poder actuar y prevenir a tiempo; una detección precoz es fundamental para
poder dar el mejor tratamiento y mejorar el pronóstico de esta enfermedad”, indica la especialista.
Recomendaciones para la prevención
- La diabetóloga afirma que lo más importante es mantener un peso adecuado, a través de una alimentación saludable y equilibrada, privilegiando frutas y verduras y evitando alimentos ultraprocesados.
- Además, recomienda realizar actividad física aeróbica al menos 150 minutos a la semana, lo que significa media hora de lunes a viernes o 50 minutos 3 veces a la semana.
- También aconseja evitar el consumo de tabaco y tratarse oportunamente si se presentan alguno de los factores de riesgo antes mencionados.
¿Quiénes debieran chequearse con un diabetólogo?
La recomendación internacional es que los adultos con sobrepeso u obesidad, con uno o más factores de riesgo, debieran chequearse al cumplir los 45 años y luego seguir con un control anual.
Por otro lado, si ya hay diagnóstico de resistencia a la insulina, prediabetes o si se tuvo diabetes gestacional, el chequeo debiera realizarse una vez al año desde el diagnóstico de la enfermedad.