Este período de confinamiento puede ser particularmente complicado para aquellos pacientes que, por diversas patologías, sufren de molestias permanentes. Conoce aquí́ algunas recomendaciones para sobrellevar esta condición.
Fibromialgia,
dolor lumbar persistente,
artritis,
cáncer, entre otras enfermedades, son la causa de que muchas personas tengan que convivir diariamente con molestias y dolores.
Para ello,
el doctor Rudy Garrido, anestesiólogo y jefe de la Unidad de Dolor Crónico de Clínica Las Condes, explica que los pacientes reciben un tratamiento integral por parte de equipo multidisciplinario que abarca desde el uso de fármacos específicos, hasta atención de fisiatría, psicológica y psiquiátrica.
“El dolor crónico lo abordamos desde un
modelo biopsicosocial. Para estos pacientes, su dolor ya no es solamente un fenómeno biológico, sino que también va teniendo dimensiones asociadas. Puede conllevar
alteraciones del ánimo, la ansiedad y desesperanza, la capacidad física, etc., que son factores que tienen que ser tratados en una unidad de dolor crónico en forma multidisciplinaria, para poder ayudar desde todas esas aristas”, señala.
Agrega que “los medicamentos son solo una parte del tratamiento; muchas veces son para que el paciente con dolor crónico pueda ir cultivando otros aspectos, para que sea capaz de realizar otras actividades que normalmente no valoramos, como ejemplo movilizarse, trabajar, reincorporarse a la vida diaria”.
La importancia de no suspender los controles
A juicio del especialista, los fenómenos asociados a dolor crónico pueden verse exacerbados en tiempos de pandemia, ya que el paciente está expuesto a mayor estrés e incertidumbre en diferentes ámbitos. Por ello, además de seguir el tratamiento, es importante no abandonar un ejercicio moderado, una alimentación adecuada y una buena
higiene del sueño, entre otras medidas.
Asimismo, enfatiza en que es clave que estos pacientes no dejen de controlarse ni suspendan el uso de sus fármacos habituales. “Es muy importante que no pierdan el contacto con su médico tratante y una buena alternativa para ello es el servicio de
telemedicina. El equipo de medicina del dolor está disponible para atender de las necesidades de nuestros pacientes a través de esta modalidad”, asegura.
Complementa lo anterior especificando que, en caso de requerir una atención presencial, la clínica ha dispuesto todas las medidas y protocolos para una visita segura de sus pacientes, con un flujo diferenciado, entre otros.
Asimismo, hace un llamado a tener un particular cuidado en la
automedicación, ya que muchas veces eso retarda una consulta oportuna y puede generar efectos adversos, para lo que reitera la relevancia de la supervisión médica y la continuidad del tratamiento dado.
Algunas recomendaciones
- Mantener rutinas.
- Fortalecer vínculos afectivos saludables.
- No exponerse a un exceso de información.
- Mantener las dosis de fármacos recetados.
- Consultar antes de automedicarse.