Embarazo en mujeres chilenas mayores de 35 años siguen en alza.
Hace 30 años sólo el 10% de los nacimientos del país ocurría en
mujeres mayores de 35 años, mientras que hoy -según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE)- las chilenas se embarazan cinco veces más a esta edad que tres décadas atrás. Es decir, la postergación de la maternidad hace que en la actualidad los
embarazo sobre los 40 años sean más frecuentes también.
“En este tipo de casos, lo más importante es evaluar a la paciente, ya que postergar la maternidad para
después de los 40 implica factores de riesgo asociados a la edad, por lo que es necesario hacer chequeos. Sin embargo, actualmente contamos con las herramientas necesarias para poder manejar los embarazos de alto riesgo", indica el doctor
Pedro Daza, ginecólogo de Clínica Las Condes.
Si la paciente se realiza todos los controles y toma las medidas necesarias, se puede lograr llevar al éxito embarazos de alto riesgo en mujeres mayores de 40 años. Los principales riesgos son defectos que se pueden presentar en los óvulos, debido a que a medida que la mujer envejece baja la cantidad y calidad de éstos, lo que puede traer complicaciones en el feto.
El principal riesgo en este grupo son
las alteraciones cromosómicas como el
Síndrome de Down, además de riesgos como la
hipertensión crónica, trombofilias, diabetes mellitus,
insuficiencia renal y síndrome de fosfolípido y otros que pueden aparecer con la edad.
El doctor Daza explica que dentro de las principales herramientas para prevenir problemas en un embarazo de alto riesgo es la realización de
ecografías periódicas, medicamentos preventivos y exámenes bioquímicos.
"Es posible lograr embarazos en cualquier momento, ya que hay más conocimiento respecto a los cuidados y controles que deben seguir estas madres. Además, hoy existen exámenes que permiten detectar dificultades precozmente y tratamientos con los que aumentan las posibilidades de conseguir un embarazo seguro", sostiene.