Hasta el 2% de la población puede tener fibromialgia. ¿En qué consiste?
Seguramente en el último tiempo has escuchado hablar de la
fibromialgia. Se trata de una
condición de causa poco clara que provoca dolores articulares, musculares y fatiga. Como enfermedad es nueva, solo en 1992, la OMS la reconoció como tal.
Los pacientes que sufren esta enfermedad al ser examinados
presentan dolor en puntos específicos cuando se presiona zonas como la base del cuello, codos y la parte medial de las rodillas. También está asociada a otros síntomas como
problemas para dormir, rigidez muscular al despertar por la mañana, dolor de cabeza, sensación de hormigueo o adormecimiento de manos o pies y problemas para concentrarse o dificultades de memoria.
El
doctor Vicente González,
reumatólogo de Clínica Las Condes, explica que el
diagnóstico requiere de una consulta médica con tiempo para explorar todas las posibles causas y un examen clínico acucioso. “Los exámenes tienen valor para encontrar causas que pudieran explicar los dolores y la fatiga aparte de fibromialgia, pero no existe un examen específico para determinar esta condición”, señala el especialista.
Hasta ahora, no se conocen las causas concretas de la fibromialgia, pero se ha visto que los síntomas surgen tras acontecimientos estresantes o traumáticos, lesiones graves, ciertas enfermedades. Aunque también existen casos en los que la enfermedad comienza sin causa aparente.
Se estima que en Chile hasta el 2% de la población puede padecer fibromialgia, la mayoría mujeres. “Fibromialgia y depresión a veces están relacionados. La depresión se presenta con más frecuencia en mujeres. Además, encontrar puntos dolorosos localizados a la presión es más difícil en hombres. Es probable que los hombres tengan fibromialgia y estén menos diagnosticados”, señala el doctor González.
A juicio del reumatólogo,
el tratamiento de esta enfermedad debe ser individualizado y de acuerdo a las características propias de cada paciente. Hoy se utilizan medicamentos como antidepresivos y reguladores de neurotransmisores que se usan para el dolor neuropático y relajantes musculares.
“Si hay evidencias de depresión o evento psicológico traumático como un abuso sexual, por ejemplo, es necesario que un psiquiatra realice una evaluación del paciente y de ser necesario, indique tratamiento”, dice el doctor González.
“
El ejercicio físico mejora fatiga y dolor así que ser tratado inicialmente con kinesiólogo es recomendable. En casos con mucha sintomatología dolorosa y síntomas resistentes a tratamiento habitual, existen unidades de dolor cuyo enfoque es multidisciplinario”, indica el reumatólogo.
El ejercicio físico es una buena fuente de endorfinas, que son los analgésicos naturales del ser humano
. Con ejercicio físico, el dolor mejora bastante y además se restaura un ciclo de sueño más normal, insiste del doctor González.