Tener hijos es un proyecto que para gran parte de las parejas simboliza la consolidación de su compromiso y amor. Pero este proyecto no a todos les resulta fácil. Si tienes dudas, te invitamos a la charla "En camino para ser padres" a cargo de nuestros especialistas de la Unidad de Medicina Reproductiva.
Rabia, pena, angustia y frustración, son algunas de las emociones con que a diario deben lidiar las parejas que han proyectado tener un hijo, y que ven cómo con el paso del tiempo este gran anhelo nunca se hace realidad. De hecho, no son pocas las parejas que, fruto de este duro trance, entran en una severa crisis dentro de su relación, producto de los efectos negativos que esto conlleva en la autoimagen y de lo difícil que se vuelve, de pronto, andar dando “explicaciones” a un entorno social que no siempre comprende las implicancias de este problema.
Tomar la decisión de consultar con un especialista y no seguir lamentando la no llegada de un hijo es clave. Porque mientras antes se detecten las posibles causas que hay tras la infertilidad, mayores son las posibilidades de encontrarle solución. “Un diagnóstico inadecuado o tardío puede cambiar el pronóstico de fertilidad de una pareja”, sentencia el doctor Antonio Mackenna, ginecólogo de la Unidad de Medicina Reproductiva de Clínica Las Condes, que en sus 30 años de funcionamiento ha hecho posible que miles de parejas logren su sueño de “hacer familia”.
¿Cuándo consultar? ¿A quién acudir? Aquí, las respuestas a las principales preguntas que se hacen las parejas en este proceso.
¿Seremos infértiles?
Se habla de infertilidad cuando una pareja no logra embarazarse luego de un periodo de 12 meses de buscar un hijo. La infertilidad también incluye a aquellas parejas que tienen abortos a repetición, condición que es tanto o más angustiante que la ausencia de embarazo.
¿Seré yo el “culpable”?
Se estima que entre 10 a 15% de las parejas que quieren embarazarse sufren de infertilidad, lo cual significa que en el mundo hay alrededor de 100 millones de parejas infértiles.
Del total de casos de infertilidad, 30% es causada por factores netamente masculinos; otro 30% por factores exclusivamente femeninos, y otro 30% por factores compartidos. El 10% restante corresponde a casos en los cuales no es posible encontrar una causa con las técnicas habituales de diagnóstico.
¿De qué depende que se logre o no un embarazo?
De varios factores. Que los órganos genitales sean normales y permitan a los espermatozoides encontrarse con el óvulo; que exista disponibilidad de óvulos y espermatozoides normales, y que exista una adecuada migración de los espermatozoides a través de los genitales internos de la mujer para que puedan llegar a encontrarse con el óvulo; que ocurra la fecundación en la trompa de Falopio, y que el embrión viaje por la misma trompa hasta llegar al útero, donde debe implantarse y dar inicio a un embarazo.
Debido a que este proceso es complejo solo entre 20 a 25% de las parejas sanas que se exponen a un embarazo durante un mes lo logran.
¿Cómo nos van a abordar como pareja?
Cuando una pareja consulta en la UMR de Clínica Las Condes por problemas de fertilidad conocidos, como puede ser la ausencia de menstruaciones por falta de ovulación, el enfoque debe estar dirigido a establecer las causas del problema y corregirlas. Sin embargo, la mayoría de las veces las parejas consultan sin evidencias de una causa, y lo primero que debe hacerse es una completa historia clínica y examen físico de ambos, lo cual puede orientar hacia posibles orígenes del problema. Luego de ello se deben realizar exámenes de imágenes y de laboratorio en ambos pacientes, para buscar la causa de la infertilidad y tratarla consecuentemente.
¿Qué estudios nos van a pedir?
En el hombre el estudio básico es un espermiograma, que consiste en el análisis del volumen del semen y del recuento, motilidad, viabilidad y morfología de los espermatozoides. Si se observan alteraciones de estos parámetros se pueden solicitar una ecografía testicular y otros exámenes más específicos para precisar la causa del problema.
En la mujer el estudio comienza con una ecografía ginecológica al principio del ciclo menstrual y exámenes de sangre para medir hormonas, que permitan reflejar la reserva ovárica (una estimación de la cantidad de óvulos que quedan en los ovarios). Luego de ello se realiza un estudio de la ovulación con ecografías seriadas y nuevos estudios hormonales para verificar la normalidad del ciclo menstrual. Si todo fuera normal, en el ciclo siguiente se realiza una radiografía del útero y las trompas, llamada histerosalpingografía, para verificar la normalidad del útero y las trompas, y la factibilidad que los espermatozoides se encuentren con el óvulo. En algunos casos es necesario realizar una endoscopia (laparoscopia e histeroscopia, para ver los órganos genitales por dentro) de manera de hacer un diagnóstico más certero y, simultáneamente, tratar algunas de las anormalidades de los genitales de la mujer, como la endometriosis o las anormalidades de la cavidad uterina.
¿Por qué me dicen que no debemos perder tiempo?
El diagnóstico oportuno y certero de infertilidad es tan importante como el de cualquier otra enfermedad, ya que permite planificar el tratamiento adecuado y obtener los resultados deseados lo antes posible. No hay nada peor que la pérdida de tiempo y la realización de procedimientos innecesarios en la infertilidad, porque en la medida que avanza la edad de la mujer las probabilidades de embarazo van disminuyendo.
La UMR cuenta con un equipo multidisciplinario de ginecólogos, urólogos, enfermeras, biólogos, tecnólogos y una psicóloga, con vasta experiencia en el manejo de la pareja infértil, ofreciendo una atención de excelencia y procurando un diagnóstico oportuno y tratamientos adecuados y exitosos para lograr el objetivo de ser padres.
La infertilidad y sus causas
Las condiciones tanto del hombre como de la mujer que producen infertilidad pueden dividirse en estructurales y funcionales.
- Estructurales: aquellas anomalías de los genitales que impiden el encuentro de los espermatozoides con el óvulo, como la obstrucción de las trompas de Falopio o la endometriosis en la mujer.
- Funcionales: se refieren a la ausencia de óvulos o espermatozoides normales, que impiden que se produzca fecundación, y también a la ausencia de implantación del embrión en el útero. Dentro de las causas funcionales las más frecuentes son la ausencia de ovulación, como el síndrome de ovario poliquístico, y las anomalías de los espermatozoides producidas por infecciones y enfermedades arrastradas desde la infancia (falta de descenso oportuno de los testículos, parotiditis y varicocele).
Soluciones en UMR
La gran mayoría de las causas de infertilidad pueden resolverse con técnicas de baja complejidad: en problemas estructurales puede utilizarse cirugía endoscópica (laparoscopia e histeroscopia); en problemas de ovulación, medicamentos para inducir la producción de óvulos, mientras que para los problemas con los espermatozoides se pueden utilizar antibióticos, antiinflamatorios y antioxidantes, o puede ser necesario una cirugía para corregir un varicocele. Para los problemas de implantación puede ser necesario tratar alteraciones inmunológicas o de la coagulación, o bien tratar infecciones o cicatrices de la cavidad uterina.
Respecto de los tratamientos de alta complejidad, existen algunas indicaciones primarias para realizarlos, como la disminución de la reserva ovárica, alteraciones severas e intratables de los espermatozoides, y anormalidades incorregibles de los genitales internos, que impiden el encuentro de los espermatozoides con el óvulo, como la ausencia de las trompas de Falopio. También se utilizan cuando han fracasado los tratamientos de baja complejidad.
¿Cómo participar en las actividades de UMR?
Más de 200 parejas al año recibe el programa de apoyo de la UMR, considerando las entrevistas personales y actividades grupales.
Entrevistas con la psicóloga: el ideal es que todas las parejas tengan una entrevista con la psicóloga, ya que es un espacio de información, asesoría, preparación y apoyo. Generalmente llegan derivadas por el médico tratante.
Actividades de grupo: conversar sobre un tema común que les ocurre a algunas parejas puede ser muy sanador. Los grupos se programan de acuerdo a las distintas etapas y tipos de tratamiento.
Charlas educativas: se realizan una vez al mes y se difunde a través de la página web y revista Vivir Más. En ella participan un médico, una matrona y la psicóloga.
Libros: Tener un hijo: Conociendo la infertilidad y los caminos para resolverla y Reproducción humana e infertilidad, editados por el doctor Antonio Mackenna, son una valiosa fuente de información sobre los aspectos médicos y psicológicos de la infertilidad y los tratamientos.
Inscripción a la charla del sábado 19 de octubre.