Los niveles elevados de glucosa pueden detectar de manera temprana, la
diabetes o
prediabetes.
“La
glucosa es un carbohidrato, y es el azúcar simple más importante en el metabolismo humano… es la
principal fuente de energía para las células”, explican los especialistas.
La glucosa está muy relacionada con
la hormona insulina. “Esta hormona
regula los niveles de azúcar en la sangre. Cuando comemos, la glucosa entra en el torrente sanguíneo y los niveles de glucosa en sangre aumentan. El páncreas es el encargado de producir la insulina y gracias a ella, la glucosa puede entrar a las células donde es metabolizada para producir energía. Así, los niveles de glucosa en la sangre descienden”, señala esta especialista.
¿Cuándo debo medir mi nivel de glucosa?
Todas las personas mayores de 45 años debieran realizarse una vez al año un examen de sangre que mida los niveles de glucosa.
“En el caso de las
personas con sobrepeso (IMC mayor a 25) y que además tenga
otros factores de riesgo adicional como sedentarismo, familiares en primer grado con diabetes, miembros de un grupo étnico de alto riesgo (afroamericanos, latinos, nativo americano, asiáticoamericano), también
deben realizarse el examen todos los años, sin importar la edad que tenga”, indica la doctora Sanzana.
Al sobrepeso y el sedentarismo, se suman:
- Mujeres que tuvieron un hijo que al nacer pesó más de 4 kilos o que fueron diagnosticadas con diabetes gestacional.
- Pacientes hipertensos o en tratamientos por hipertensión.
- Pacientes con dislipidemia (colesterol HDL menor 35 mg/dl o triglicéridos sobre 250 mg/dl).
- Pacientes con historia de enfermedad cardiovascular.
- Mujeres con síndrome de ovario poliquístico.
Todos ellos
deben controlarse la glucosa cada uno o tres años y en caso de estar muy cerca de los límites, se puede indicar exámenes cada seis meses.