La donación de sangre voluntaria es un acto altruista y solidario, fundamental para ayudar a salvar la vida de pacientes que requieran transfusiones sanguíneas como parte de su tratamiento. Sin un stock necesario, gran parte de la actividad médica quirúrgica, terapias oncológicas, trasplantes o cirugías traumatológicas no se podrían realizar.
Según cifras de la
Organización Mundial de la Salud, cada 30 segundos una persona necesita una
donación sanguínea; durante la
pandemia, esta cifra ha aumentado a raíz de los
pacientes críticos Covid-19 hospitalizados en centros de alta complejidad. A pesar del contexto que vivimos y de la situación crítica por la que atraviesan los Bancos de Sangre del país, la
tasa de donación voluntaria ha disminuido notoriamente, en gran medida por las cuarentenas preventivas y el temor a contagiarse de coronavirus.
La
Dra. María de los Angeles Rodríguez jefa del Banco de Sangre de Clínica Las Condes, explica que Chile tiene una tasa de donación de 17 personas por cada 1000 habitantes:
“Para asegurar el stock nacional, se necesitan 340.000 donantes al año. Chile tiene alrededor de 35% de donantes voluntarios altruistas y 65% de reposición. La donación más segura es la del donante altruista, porque sabe que su sangre es segura y no tiene otro interés, presión familiar o social para donar.”
Así, con todo ello, para muchas personas el acto de acudir a un Banco de Sangre resulta un hecho intimidante, principalmente a que aún persisten una serie de mitos respecto al proceso y los requisitos para hacerlo.
A continuación, derribamos algunos de ellos para motivarte a decidir si ser un donante voluntario este año.
1. Donar sangre nos debilita:
Es falso que donar sangre debilite el organismo, dado que este se recupera muy rápidamente tras una donación de sangre.
2. Donar sangre adelgaza o engorda:
Donar sangre no altera el peso corporal. El donante entrega cerca de 450 ml de sangre, pero esta se repone rápido y no hay cambios evidentes en su cuerpo. Tras la donación sí es normal que se abra el apetito, por la necesidad de recuperar energía. El consejo es comer de forma balanceada y beber mucho líquido en las 12 horas siguientes.
3. Si dono sangre puedo contraer VIH-SIDA u otra enfermedad:
Los donantes no pueden contraer ninguna enfermedad, ya que todo el material usado para la donación (jeringas, agujas, etc.) es estéril, de un solo uso y desechable.
En el Banco de Sangre CLC, se ha implementado la atención de donantes a través de agenda médica para evitar aglomeraciones en salas de espera y de donación, contribuyendo a que todo el proceso sea lo más seguro para nuestros pacientes. Los colaboradores del Banco de Sangre trabajan y cumplen todos los protocolos de uso de elementos de protección personal y lavado de manos para asegurar una atención segura. Se desinfectan constantemente todas las superficies que los donantes de sangre tienen que tocar.
4. Las personas con tatuajes no pueden donar sangre:
Las personas que tienen tatuajes sí pueden donar sangre, siempre que hayan pasado más de 12 meses desde el último tatuaje.
5. Si tengo hipertensión no puedo donar:
Las personas con
hipertensión sí pueden donar sangre, siempre que tengan su presión dentro de los rangos aceptables al momento de la donación y hayan sido evaluadas por un médico especialista y se encuentren cumpliendo su tratamiento de manera regular.
6. Los diabéticos no pueden donar sangre:
Quienes tienen
diabetes y se encuentren realizando el tratamiento oportuno, con los medicamentos indicados, sí pueden donar sangre. Siempre y cuando no sea INSULINODEPENDIENTE.
7. Puedo donar sangre si tuve Covid-19:
Todas aquellas personas que hayan tenido Covid-19, que no hayan sido hospitalizados y se encuentren asintomáticas pueden realizar una donación posterior a 4 semanas desde el alta médica. Si ha estado hospitalizado por COVID y sometido a intubación orotraqueal y ventilación mecánica invasiva debe esperar 3 meses después del alta para poder donar sangre.
8. Si me vacuno contra el Covid-19 o influenza puedo donar sangre:
No existe restricción para la donación de sangre de aquellas personas que se hayan vacunado contra COVID-19 o
influenza.