Antes de planificar las vacaciones en el extranjero es fundamental informarse sobre las posibles enfermedades y riesgos para la salud que existen en cada país. Mantener al día las vacunas que se necesitan en cada caso es la principal medida de prevención.
Los viajes hace tiempo que dejaron de ser un asunto de un pequeño grupo y ahora el mundo se abre a un público amplio y diverso para turismo, estudios, deporte, trabajo, labores humanitarias o religiosas, en todas las épocas del año. ¿Qué medidas de precaución se deben tener para evitar enfermedades?
“Es importante preocuparse de los riesgos de salud que puedan encontrarse en el destino y una de las medidas más efectivas y seguras de no adquirir una infección es asegurarse de que las inmunizaciones requeridas estés puestas y al día”, explica el
doctor Guillermo Acuña, infectólogo del Centro del Viajero de Clínica Las Condes.
Para eso, es importante
considerar los lugares de destino, donde pueden
circular infecciones que no existen en nuestro país o que son muy raras. “Por ejemplo, el
sarampión, que es raro en Chile, puede estar circulando en naciones industrializadas como los países europeos y es necesario estar seguro de que uno está inmunizado, ya sea porque tuvo la enfermedad cuando niño o porque recibió la inmunización apropiada; en caso contrario, se recomienda actualizarla”, dice el doctor Acuña.
Vacunas actualizadas
Lo primero que se debe hacer al planificar un viaje al extranjero es
asegurarse de que se han recibido las vacunas de rutina, es decir, aquellas que el
Ministerio de Salud recomienda y que se van actualizando año a año.
“La
vacuna anti-tetánica, por ejemplo, que se recibe en forma secuencial hasta los 10 años, tiene una protección por diez años, de manera que a partir de los 20 años debiera recibirse y repetir cada 10 años. Sin embargo, en nuestro país no es rutinaria la vacunación en adultos y, salvo que se sufra un accidente y se reciba la vacuna antitetánica en una Posta o
Urgencia, es raro que un adulto tenga al día esta vacunación”, dice el doctor.
Por otro lado, El
tétano es una bacteria que vive del intestino de los animales, cualquier herida sucia con tierra es una herida tetanogénica (no solo los clavos oxidados), por lo que requiere revacunación. En los viajes los accidentes pueden ocurrir en cualquier lado y muchas veces en lugares retirados de una ciudad (templos en medio de la jungla o parques nacionales con animales), donde puede que no se encuentre la vacuna o no haya aguja desechable, por lo que es preferible tener la vacunación al día”.
Programa de vacunación en Chile
Debido a que este esquema se ha modificado con el tiempo, es necesario tratar de
conocer las inmunizaciones que efectivamente se recibieron o las enfermedades que se tuvieron en la niñez y que dejan inmunidad permanente. “Es posible que se requieran otras vacunas según destino, actividad y largo de la permanencia. Por eso, en caso de dudas, se recomienda consultar un Centro del Viajero”, comenta el
doctor Guillermo Acuña..
Medidas preventivas de picada de mosquito:
- Llevar ropa preferiblemente clara que cubra la mayor parte posible del cuerpo.
- Usar repelentes de insectos que contengan DEET (dietiltoluamida) con concentración entre 25-35%, IR 3535 (3-[N-butil-N-acetil]-aminopropionato de etilo) o KBR3023 (también conocido como icaridina o picaridina) sobre 20% y se deben respetar estrictamente las instrucciones que figuran en la etiqueta del producto.
- Debe aplicarse tanto de día como de noche, al menos cada 6 horas.
- Si se utiliza al mismo tiempo un repelente y un filtro solar, el filtro solar se debe aplicar antes que el repelente.
- Poner barreras físicas en puertas y ventanas, como pantallas, mallas o redes impregnadas de insecticida, o cerrar puertas y ventanas.
- Dormir con mosquiteras, especialmente durante el día.
Fuente: Minsal
País por país
El doctor Acuña aconseja consultar con un especialista en medicina del Viajero apenas se tenga listo el itinerario de viaje y se haya decidido qué actividades se realizarán en cada uno de los países que se piensa visitar, así como las combinaciones que se harán antes de llegar a destino.
“Ojalá tener también el historial de vacunaciones y, en caso de que se requiera, una carta para eximirse de la
vacunación de fiebre amarilla, así como el número de pasaporte. Del mismo modo, es importante comentar al médico las enfermedades crónicas que se padecen y los medicamentos que se toman en forma rutinaria y las eventuales alergias a ellos”, dice.
El caso de la Malaria
No se debe olvidar que la
malaria por el momento no tiene vacuna y eventualmente requiere de prevención (profilaxis) con medicamentos cuando se visita una zona de riesgo.
Hay otras enfermedades de alta prevalencia que no tienen vacunas ni medicamentos profilácticos como el
dengue, zika y chikungunya y en esos casos debe asumirse precaución con el uso de repelentes apropiados.
Precauciones básicas que deben tomar todos los viajeros:
- Lavarse las manos con jabón a menudo.
- No consumir leche sin pasteurizar, bebidas no embotelladas, alimentos crudos o sin lavar y/o pelar en el caso de frutas y verduras. El agua para beber debe hervirse, clorarse o filtrarse.
- Consumir solo mariscos y pescados cocidos. Se debe tener especial cuidado con la alimentación de lactantes, embarazadas y adultos mayores.
- Conducir con cuidado y utilizar el cinturón de seguridad (los accidentes de tráfico son una causa frecuente de lesiones en los turistas).
Si vas a viajar
El
Centro para el Control de Enfermedades de Estados Unidos divide las vacunas para viajeros en tres categorías:
- Vacunas rutinarias: son las mencionadas en el plan nacional de vacunación del Minsal, más las de Influenza (anual) y tétanos (cada 10 años a partir de los 20 años).
- Vacunas requeridas: son aquellas que se le pueden exigir a un viajero para entrar a un país o para embarcar en un avión o barco desde un país con destino a otro, y que exigen un certificado de inmunización. En este grupo están la vacuna de fiebre amarilla y la de meningitis para aquellos peregrinos a La Meca (Hajj). La fecha de vacunación debe ser al menos 10 días antes de entrar al país y menos de tres años.
- Vacunas recomendadas: son aquellas que, aunque no son obligatorias, se aconsejan según destino, tipo de viaje, y condiciones del viajero (edad, embarazo, enfermedades crónicas, inmunodeficiencia, etc). En este grupo están las vacunas contra la fiebre tifoidea, la rabia y la hepatitis A y B.