Una es frecuente en la tercera edad, mientras que la otra puede aparecer incluso en la juventud. Descubre las diferencias.
La artritis y la artrosis suelen confundirse porque tienen una cosa en común:
afectan a las articulaciones y producen dolor. Pero, mientras la artrosis es una enfermedad degenerativa y crónica que afecta a las articulaciones, la
artritis, que es inflamatoria y también crónica, se caracteriza por la mayor producción de líquido articular y porque puede atacar más de una articulación.
“A veces puede aparecer en etapas más tempranas de la vida que la osteoartritis, que es una enfermedad degenerativa o de desgaste del cartílago, y que tiene su mayor peak sobre los 65 años”, explica el doctor
Jaime Duboy, traumatólogo de Clínica Las Condes.
“Las causas son desconocidas, factores que alteran la inmunidad del paciente son más frecuentes en las artritis (genéticas) y pueden ser reactivas a enfermedades sistémicas del tipo inmunológico”
— Doctor Jaime Duboy
Síntomas y factores de riesgo
Ambos trastornos comparten algunos factores de riesgo
como ser mujer, la predisposición genética, la menopausia y la obesidad. En la
artrosis, el síntoma principal es el dolor articular, que se intensifica con la sobrecarga y el movimiento y, puede aparecer rigidez articular, mientras que la artritis suele evolucionar en forma de brotes sintomáticos, en los que las articulaciones afectadas están inflamadas, duelen y presentan dificultad de movimiento, así como también algún grado de rigidez.
El 28% de los mayores de 60 años sufre artrosis, por el desgaste de articulaciones, aunque puede aparecer en gente más jóvenes, Pero la artritis puede aparecer a cualquier edad, siendo más común de los 20 a los 40 años.
“Tienen tratamiento médico paliativo con buena respuesta en más del 80% de los casos, sólo los más graves pueden llegar a necesitar cirugía cuando el daño es avanzado y las molestias no responden al tratamiento conservador, llegando incluso a necesitar prótesis articulares”, indica el doctor.
En su tratamiento, también tienen en común que el control del peso puede ayudar, pues el sobrepeso puede hacer que duela más.