Dolor comienza en la espalda, pero se prolonga hasta bajo la rodilla.
No cualquier dolor de espalda es
lumbociática (comúnmente llamada
ciática), sino que es un dolor específico que se origina en la base de la columna lumbar, corre por el glúteo y llega hasta la pierna, bajo la rodilla.
“El dolor se produce en el
nervio ciático, que se forma en la columna y va hasta el pie, y que tiene funciones sensitivas y motoras”, explican los especialistas.
Por otro lado, el especialista indica que “del total de la lumbociática, el 80% son inflamaciones banales, musculares, tendínias y que dan dolor a la pierna, pero no hay un compromiso real neurológico, es momentáneo y cede en el 60% en una semana y en el 90% alrededor dos o tres. El problema es el dolor de pierna agudo y que no cede en un plazo razonable de una o dos semanas, eso con frecuencia se asocia a estrecheces del canal raquídeo que comprimen e irritan un nervio”, indica.
Las
hernias discales y otras condiciones en pacientes mayores -que tiene un canal estrecho producto del desgaste- también pueden producirlo.
El dolor que provoca es de
tipo irritativo, puede causar más o menos dolor, sin embargo, el signo de alerta es el compromiso motor, cuando se pierde fuerza por el nervio afectado. “El dolor no es para alarmarse sin la pérdida de fuerza, de hecho, la pérdida de fuerza es la que se trata con cirugía o infiltración. Cuando hay sólo dolor hay que tener paciencia, tomar antiinflamatorios, hacer terapia kinésica y esperar a que esto se resuelva”, dicen.
No afecta particularmente a los deportistas y, si bien hay condiciones en algunos deportes, es más por estrés o sobrecarga, no por ciática. La hernia no es una condición en corredores. “En general, si uno se prepara y rehabilita correctamente no debería serlo. En la patología del disco lo principal es la carga genética y herencia, suman factores como el
tabaco, sobrepeso y deporte de impacto, lo que termina desencadenando el problema”, sostienen.
La recomendación principal para evitarlo es mantener un buen peso, hacer ejercicio, actividad física y
no fumar, para mantener el disco sobre todo cuando hay herencia. “No se recomiendan reposos prolongados, mantenerse activo es mejor, con analgésicos, antiinflamatorios, en una semana debiera estar resuelto por lo general. Hay que consultar al médico después de una semana de dolor”, sostienen.