Los traslados de larga distancia, de más de 6 horas, pueden producir coágulos de sangre en las venas de las piernas. Te contamos cuáles son sus síntomas y cómo prevenirlos.
Un factor de riesgo de la
trombosis venosa profunda puede ser un
viaje en avión o en bus por más de 6 horas, el llamado
síndrome de clase turista. Esta situación conlleva un
reposo prolongado,
escasa movilidad y
flexión permanente de las rodillas.
El peligro de sufrir un
coágulo de sangre en las venas profundas de las piernas, bajo este contexto, puede ser aún mayor en
embarazadas,
obesos,
fumadores, en
enfermos cardiacos o de cáncer, en personas
mayores de 65 años, en quienes consuman algunos medicamentos -como
anticonceptivos-, se hayan sometido a una
cirugía reciente o en pacientes que tuvieron una
trombosis.
Esta patología es una condición en la cual un coágulo de sangre se forma al interior de una vena y puede impedir
el flujo de sangre a través de ella y causar
hinchazón y dolor.
Comúnmente la trombosis ocurre en las
venas profundas de las piernas o
pelvis, a esto se le llama
Trombosis Venosa Profunda (
TVP). Si una parte o todo el coágulo de sangre en la vena se desprende del sitio donde se formó, puede viajar a través del sistema venoso; a esto se le llama émbolo. Si éste se aloja en el pulmón, se le llama
tromboembolismo pulmonar (
TEP), una enfermedad grave que causa más de 50.000 muertes al año en los Estados Unidos.
Factores de riesgo
Primero que todo, no todas las personas que viajan en avión o en bus tienen el mismo riesgo de desarrollar una TVP. Sin embargo, si -por ejemplo- una persona está tomando anticonceptivos y además es obesa, la probabilidad de presentar una TVP aumenta si el traslado es de más de 6 horas.
“El viaje en avión por periodos largos, mucho más frecuentemente en verano con los vuelos transoceánicos, conlleva un estado de reposo continuo. Por tanto, un enlentecimiento del flujo de la sangre, sumado a la flexión permanente de la rodilla, provocando compresión de la vena profunda a este nivel. Estas dos situaciones se conjugan para hacer que el viaje en avión sea una condición de riesgo para sufrir una TVP”, señala
el doctor Gustavo Sepúlveda, cirujano vascular de Clínica Las Condes.
Síntomas
Lo habitual es que los
síntomas de una trombosis comiencen
dos o tres días posterior a la formación del coágulo en el interior de la vena. Por supuesto existe la posibilidad de que las molestias comiencen terminando el viaje o incluso siete días después del viaje. Esto, dependerá de la ubicación del trombo en la extremidad, por lo general las trombosis venosas profundas ubicadas sobre la rodilla tienden a dar más síntomas comparada con las que se producen bajo la rodilla.
Los síntomas de una Trombosis Venosa Profunda son:
- Hinchazón
- Dolor
- Calor
- Enrojecimiento
Hay que diferenciarla de la
Trombosis Venosa Superficial o
tromboflebitis superficial que causa dolor, sensibilidad, induración y/o enrojecimiento en una vena superficial, lo que es más frecuentemente visto en la
cara interna de la pierna.
Los signos de la TVP pueden ser causados por un coágulo, o pueden estar relacionados con otra condición. Es por esto, que es importante realizar un estudio de imágenes, en este caso un
eco doppler venoso, para determinar si un coágulo está presente o no.
Lo más importante es consultar lo antes posible, probablemente lo más directo sea algún servicio de
Urgencia, pero si existe la posibilidad de una atención en consulta se debe pedir una hora con un
Cirujano Vascular.
Prevención
¿Cómo prevenir una trombosis en un viaje de avión o en bus? El doctor Gustavo Sepúlveda recomienda las siguientes medidas para traslados prolongados, de más de 6 horas:
- Uso de medias elásticas de compresión graduada
- Hidratarse constantemente
- Pararse del asiento
- Caminar al menos cada 2 horas
- Realizar ejercicios de extensión y flexión de las piernas
- Mueva los pies, tobillos y dedos, durante el viaje.
- No debe usar ropa ajustada, ya que todo lo que produzca compresión y dificultad al retorno venoso, facilita la formación de un coágulo.