Las enfermedades reumatológicas en la infancia, si bien no son tan frecuentes, pueden ser potencialmente complejas, por lo que es importante estar alertas y reconocer sus síntomas.
La
doctora Pamela Morales, pediatra y reumatóloga infantil de Clínica Las Condes, explica que efectivamente las
enfermedades reumatológicas, que son las que afectan a las
articulaciones, los
músculos,
tendones y
huesos, pueden presentarse en niños de manera aguda o crónica.
Dentro de los
cuadros agudos se encuentran patologías como
artritis transitorias,
Púrpura de Schonlein-Henoch y
Enfermedad de Kawasaki. En tanto, las
enfermedades de evolución crónica más frecuentes en pediatría corresponden al grupo de
artritis idiopática juvenil.
Los síntomas al que los padres deben estar alerta son:
- Dolor articular persistente.
- Dolor en la movilización de alguna articulación.
- Aumento de volumen articular.
- Fiebre prolongada o intermitente
- Alteraciones en la orina
- Lesiones en la piel y mucosas
La especialista agrega que en algunas enfermedades puede existir
caída de pelo,
aftas recurrentes,
episodios febriles recurrentes, dolor abdominal y lesiones cutáneas (violáceas o rojas). Especifica que estos síntomas corresponden a enfermedades reumatológicas crónicas.
Asimismo, la doctora Morales señala que la presentación de enfermedades reumatológicas, en su mayoría, tienen un
origen multifactorial, en donde hay interacción del medio ambiente con predisposición genética de la persona. “Se ha observado que, si en una familia hay varios afectados por una o distintos tipos de enfermedades reumatológicas, hay una predisposición a desarrollar algún tipo de estas patologías”, detalla.
En tanto,
los tratamientos utilizados con mayor frecuencia en enfermedades reumatológicas crónicas corresponden a
medicamentos inmunosupresores; se va escalando en complejidad de tratamiento según la evolución de cada niño.
La pediatra asegura que es importante tener en cuenta que las
enfermedades reumatológicas crónicas que se presentan en edad pediátrica, en general,
se mantienen en la edad adulta. Hay casos en donde hay remisión de la enfermedad, pero siempre debe considerar que puede haber una reactivación.
Otro aspecto a tener en cuenta sobre los
cuadros de artritis crónica es que tienen diferencias entre niños y adultos. En el caso de los adultos,
la artritis reumatoidea clásica afecta principalmente las articulaciones de las
manos, a diferencia de los niños en que las articulaciones que se ven afectadas con mayor frecuencia son
rodillas, tobillos y
caderas.
Artritis idiopática juvenil
La artritis idiopática juvenil es la enfermedad reumatológica crónica más frecuente en niños. Se puede presentar desde temprana edad hasta los 16 años.
Los síntomas son principalmente:
dolor articular,
aumento de volumen articular,
dolor a la movilización de la articulación afectada y
cojera. También, en algunos tipos de artritis juvenil puede haber
fiebre prolongada, l
esiones cutáneas y compromiso de otros órganos
Una de las complicaciones relacionadas a esta enfermedad es la
uveítis, que corresponde a la inflamación del
globo ocular, por lo que se deben realizar controles oftalmológicos en forma periódica.
El tratamiento dado para esta patología particularmente corresponde a inmunosupresores- Dependiendo del tipo de artritis y de la presencia o no de uveítis, se debe ajustar tratamiento. A su vez, existe un porcentaje alto de pacientes que requiere tratamiento con
fármacos biológicos. En algunos casos puntuales se determina realizar
infiltración de la articulación afectada.