La radioterapia es un tratamiento ambulatorio, de rápida aplicación y muy buenos resultados en enfermedades como el cáncer. Conoce este seguro procedimiento, el que ahora también está disponible para pacientes con Fonasa.
En una primera aproximación, radioterapia puede sonar a mal pronóstico. Pero si le dicen que es un
tratamiento curativo con un alto porcentaje de efectividad, que
no requiere que el paciente se hospitalice, que los
efectos secundarios son pocos y concentrados en el área que se irradia y que en términos de tratamiento paliativo
ayuda a quitar las molestias de una enfermedad avanzada ¿cambia la mirada? ¿Ya no parece sinónimo de mal pronóstico, sino de ayuda para curarse, no? Debiera, porque eso es justamente lo que hace la
Unidad de Radioterapia de Clínica Las Condes, poner a disposición de cada paciente la mejor tecnología y equipo médico para entregar los mejores resultados posibles.
En el cáncer hay tres tratamientos:
la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia, dependiendo del diagnóstico se aplica uno de ellos, o dos combinados cuando es necesario. Así, “la cirugía es más localizada; la radioterapia es local o locorregional (una región del cuerpo), y la quimioterapia para lo que es sistémico”, explica el
oncólogo y radioterapeuta Pelayo Besa.
“Los pacientes que vemos son pacientes con enfermedades locales o locorregional, es decir, todavía sin metástasis y, por lo tanto, si le eliminamos su cáncer, se mejora”, agrega.
El otro aspecto de este procedimiento es el de tratamiento paliativo, es decir, en la fase más avanzada del cáncer, la radioterapia se presenta como una ayuda para mejorar la calidad de vida del paciente, porque “hay personas que están realmente limitadas por el dolor o por la cantidad de medicamentos que requieren para controlar el dolor, entonces se lo irradia y desaparece el dolor y los medicamentos para controlarlo. Además, tienden a desaparecer las náuseas que producen los opiáceos y a reaparecer el apetito”.
¿Cuál es la diferencia con la quimioterapia?
Según explica el doctor Pelayo Besa, la radioterapia es un tratamiento en base a ondas electromagnéticas, a una energía que se deposita en la zona en la que se quiere eliminar el cáncer, sea local o locorregional, que son las regiones ganglionares. Y lo que hace esa energía es generar un cambio químico, es como una quimioterapia muy intensa local, que daña el material genético de la célula tumoral y, por ese mecanismo, elimina las células cancerosas.
La
quimioterapia, en cambio, consiste en tomar un medicamento -que puede ser por vía endovenosa, oral, etc.- que
se distribuye por todo el cuerpo hasta llegar a las células cancerosas para eliminarlas.
Sobre los efectos secundarios, dependiendo de la zona que se irradie y del órgano que está en esa zona, son sus síntomas. Todo lo que está afuera del área de radiación no genera síntomas. Sin embargo, al igual que la quimioterapia, puede producir sensación de cansancio. “Es el efecto sistémico y que se asocia también a un tema sicológico: como se aplica en sesiones y las sesiones son continuas y duran hasta un mes o un mes y medio, se pueden producir estrés y cansancio”, comenta el oncólogo.
En cuanto al procedimiento, la radioterapia se aplica con una máquina que genera rayos X, mientras el paciente está acostado en una camilla. Durante el procedimiento, la persona no siente nada. “Es parecido a tomarse una radiografía. Dentro de la máquina, en general, son como 10 minutos a 15 minutos, pero son segundos de radiación: la mayor parte del tiempo se destina a alinear perfectamente al paciente con la máquina”, describe el doctor Pelayo Besa.
Cada tratamiento puede durar de cinco a 40 aplicaciones, dependiendo del diagnóstico. La periodicidad de la aplicación, en tanto, va de dos veces al día hasta dos veces por semana, pero lo habitual es que sean cinco a seis semanas, una vez al día, todos los días, de lunes a viernes. Y los síntomas de cansancio pueden aparecer durante la tercera o cuarta semana y luego se pasan. En el caso de los tratamientos paliativos, el procedimiento puede durar una, cinco o 10 sesiones.
Pacientes Fonasa podrán ser derivados al Instituto del Cáncer para prestaciones PET y Radioterapia.
Este acuerdo permitirá que pacientes Fonasa puedan atenderse en el Instituto del Cáncer a valores preferenciales.
Tras el convenio entre la Red Oncológica Nacional (RONA) y Clínica Las Condes para detectar precozmente el cáncer, ahora también los pacientes Fonasa podrán acceder a las prestaciones de PET y Radioterapia en el Instituto del Cáncer de Clínica Las Condes con los valores de esta previsión de salud.
Para mayor información escríbenos a
[email protected] o llama al 226105801 o 226105802 y agenda una consulta con un médico radioterapeuta. Ese día deberás traer el informe de biopsia y los exámenes de imágenes que poseas.