¿Deportistas con sobrepeso?
03 de mayo, 2017
·Actividad Física
Escasa cultura alimentaria de los jugadores y la ausencia de nutricionistas en los clubes pueden ser factores de riesgo.
En un país en que el sobrepeso y la obesidad afectan al 63% de la población adulta, es lógico que el problema permee en todas las áreas, incluso en el deporte, donde se supone hay menos posibilidades.
En febrero, el entrenador de Colo Colo, Pablo Guede, señaló en una conferencia de prensa que dos de sus futbolistas juveniles (Gabriel Suazo e Iván Morales), que venían llegando de un torneo sudamericano, no llegaron de la mejor forma, lo que en la práctica significó incluso más de cuatro kilos de sobrepeso. Aún más, en Huachipato, el arquero (Brayan Monsanva), volvió con cinco kilos demás. ¿Cómo sucedió? Es una incógnita, pues no es normal que un jugador suba 4-5 kilos de peso en un periodo tan corto y en el marco de una competencia tan importante.
La falta de un nutricionista o nutriólogo dedicado a ellos pudo ser uno de los factores, pues en la dieta trabajan en general el preparador físico y los médicos del deporte.
Más allá de lo llamativo que es que tres jugadores regresen de un torneo de alto rendimiento con síntomas de sobrepeso, no hay que dejar de lado las consecuencias que tiene para la salud del futbolista el exceso de kilos.
El doctor Francisco Verdugo, jefe del Centro de Medicina del Deporte de la Clínica Las Condes, explica que la masa grasa es un lastre y que, metabólicamente, es como andar con una mochila extra de peso que tienen que soportar por 90 minutos. “Se lesionan más rápido, su sensación de esfuerzo físico es mayor y su sensación de fatiga también aumenta”, dice. En el fútbol, que no tiene una intensidad permanente, sino piques de intervalos, el cuerpo, más que grasa, usa los carbohidratos como energía. “Y en ese sentido el tener grasa dentro del músculo no favorece”, agrega. Con más peso, el músculo debe trabajar más y el sistema cardiovascular también, lo que aumentará la frecuencia cardíaca.