¿Qué es el pie bot o zambo?
12 de junio, 2018
·Niños
Malformación se puede corregir con un sistema de yesos semanales.
Pie zambo, talipes equinovarus o pie bot. Esos son algunos de los nombres con los que se conoce a la deformidad congénita del pie y que huesos, músculos, tendones y vasos sanguíneos pueden afectar a uno o ambos pies. Pie bot es el nombre más popular y significa “pie deformado” en francés.
Los especialistas en traumatología infantil de Clínica Las Condes., explica que corresponde a una malformación que se caracteriza por un aumento del arco del pie (Cavo), acortamiento del tendón de Aquiles (Equino), inversión del talón (Varo) y torsión de la parte anterior del pie (Supino). “Aunque en algunos casos está deformidad se asocia a alteraciones genéticas o enfermedades neuromusculares congénitas, en la mayoría de los casos no existe una causa aparente”, dice el especialista.
Diagnóstico y tratamiento del pie bot
La mayoría de las veces se sabe de esta condición antes de que la guagua nazca, ya que es apreciable en las ecografías durante el embarazo.
Su diagnóstico, dice el traumatólogo, es clínico y basta con el examen físico del paciente. Como complemento al estudio y tratamiento se suelen pedir radiografías. “En la actualidad, el tratamiento de elección es mediante el método del doctor Ponseti (QEPD). Este consiste en manipulaciones y colocación de yesos seriados semanalmente, seguidos de una tenotomía (corte) mínima del tendón de Aquiles”, señalan los doctores
En más del 90% de los casos, es necesario cortar el tendón de Aquiles. “Este es un procedimiento menor, ambulatorio, y muy bien tolerado por los niños. Una vez realizada, el niño queda con yesos por 3 semanas, y después se indica el uso de una férula nocturna hasta los 4 años de edad”, explican los traumatólogos.
En un porcentaje importante de los pacientes que no adhieren al uso correcto de la férula, se producen recidivas. “Es decir, se vuelve a deformar el pie, lo que hace necesario comenzar nuevamente con los yesos. En ocasiones, también es necesario modificar la posición de algunos tendones. Y en un porcentaje menor de los casos, en especial en pacientes portadores de enfermedades genéticas o neurológicas, es necesario una cirugía mayor de reconstrucción del pie”, advierten los especialistas.
Cuando el tratamiento es tardío, el método del doctor Ponseti también puede ser efectivo, sin embargo, por lo general, estos pacientes presentan deformidades graves, sin el potencial de remodelación de los niños. Por lo tanto, “los resultados son menos exitosos, y muchas veces se logra mejorar el aspecto del pie, pero manteniendo cierta rigidez”.