Coma etílico: consumo excesivo de alcohol en poco tiempo

Se acercan las Fiestas Patrias y con ello mucha comida, y en ciertos casos, mucho alcohol. Ambos excesos tienen severas consecuencias para la salud. En el caso del alcohol, incluso podrían provocar la muerte en pocas horas.

El binge drinking o ingesta de al menos cuatro bebidas alcohólicas en el lapso de dos horas en el caso de las mujeres, y cinco o más en los hombres, es una práctica de moda entre los jóvenes, y una situación que puede darse fácilmente con tantos días de celebración. Peor, si se hacen competencias por quién toma más en menos tiempo.

El doctor Luis Herrada, médico urgenciólogo y jefe del Servicio de Urgencia y Rescate de Clínica Las Condes, advierte que “grandes cantidades de alcohol de alta gradación, en pocos minutos, puede generar la depresión del sistema nerviosos central mucho más rápido que en alguien que lo tome lo mismo en más tiempo. Es peligrosísimo, se pueden morir”, sostiene.

El coma etílico, que es la pérdida de conocimiento causada por el alcohol, puede suponer la muerte del individuo por depresión del sistema cardiorrespiratorio o por asfixiarse con su propio vómito.

Aunque en las fases iniciales de la intoxicación etílica aguda aparece mayor fluidez verbal, sensación de bienestar, risa fácil y desinhibición, también aparece un menor autocontrol y luego los efectos típicamente sedantes con una reducción de la capacidad de rendimiento y concentración, torpeza motora, desequilibrio y pérdida de reflejos, entre otros.

Además del efecto inmediato de beber grandes cantidades de alcohol, cuando esto se hace de forma reiterada en el largo plazo (abuso de alcohol) también tiene consecuencias serias para el organismo. Aproximadamente el 90% del alcohol que pasa a la sangre es eliminado por oxidación en el hígado, lo que implica un gran trabajo para este órgano y que puede terminar produciendo cirrosis.