Con la llegada de las altas temperaturas, es crucial comprender cómo afectan a diferentes grupos de edad, ya que cada etapa de la vida presenta consideraciones únicas en términos de salud y bienestar durante los periodos de calor extremo.
Desde el
Departamento de Dermatología de Clínica Las Condes, los especialistas afirman que independiente de la edad, la protección contra los
rayos ultravioletas (UV) con protección solar, es indispensable.
1. Bebés y niños pequeños: Los bebés y niños pequeños son especialmente sensibles al calor debido a su incapacidad para regular eficientemente la temperatura corporal. Pueden deshidratarse rápidamente, lo que podría resultar en golpes de calor. Es esencial mantenerlos bien hidratados, vestirlos con ropa ligera y evitar la exposición prolongada al sol.
2. Niños en edad escolar: Los niños en edad escolar tienden a estar más activos durante el verano, participando en actividades al aire libre. Es importante garantizar que
se mantengan hidratados y se protejan del sol con protector solar y ropa adecuada. Además, se debe fomentar la conciencia sobre los riesgos del calor excesivo.
3. Adolescentes: Los adolescentes, al igual que los niños, pueden enfrentar riesgos si no toman precauciones adecuadas. Debido a su participación en
actividades deportivas y sociales, es esencial que estén al tanto de la importancia de la hidratación y la protección solar. Además, deben reconocer los síntomas de un golpe de calor y buscar ayuda si es necesario.
4. Adultos: Los adultos también pueden sufrir las consecuencias del calor extremo, especialmente aquellos con condiciones médicas preexistentes. Las enfermedades crónicas, como la
hipertensión o la diabetes, pueden agravarse en climas calurosos. Es crucial mantenerse hidratado, evitar la exposición prolongada al sol y buscar refugio en lugares frescos durante las horas más calurosas del día.
5. Adultos mayores: Las personas mayores tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones relacionadas con el calor debido a la disminución de la capacidad del cuerpo para regular la temperatura. Los golpes de calor y la deshidratación son amenazas significativas. Se recomienda que busquen ambientes frescos, eviten la exposición excesiva al sol y se hidraten regularmente.
Consejos generales para todas las edades: