¿Cuándo se indica medicamentos para el déficit atencional?

Un informe del Instituto de Salud Pública (ISP) evidenció que entre 2007 y 2016 la importación del fármaco metilfenidato (MFD) creció un 240%. Este medicamento, más conocido por sus nombres comerciales como Ritalín, Aradix, Metrans o Rubifen, es el principal tratamiento para el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), un trastorno neurobiológico frecuente y crónico que a veces persiste hasta la edad adulta.

El déficit atencional se caracteriza por presentar:
 

• Inatención
• Hiperactividad
• Impulsividad

Según el doctor Patricio Ruedi, neurólogo de Clínica Las Condes, el metilfenidato es un medicamento muy antiguo que está desde los años 50 y ha sido probado como el medicamento más efectivo para este trastorno.

“Que sea antiguo, no significa que no sea efectivo-eficiente. El punto es que se trata de un medicamento que tiene una indicación médica, que esa indicación médica debe ser hecha a través de un especialista y ese especialista debe hacer un diagnóstico correcto”, señala el especialista.

Dentro de los trastornos psiquiátricos que afectan a niños y adolescentes, los disruptivos son los más frecuentes, según un estudio realizado en escolares chilenos y publicado en el año 2012. “Entre ellos, el más frecuente es el déficit atencional con hiperactividad e impulsividad”, dice el neurólogo.

Cabe mencionar que no contar con este medicamento, generaría un gran problema para los menores, las familias y los colegios.

“Evidentemente hay que educar a la población, a los educadores, a los médicos, para hacer un diagnóstico que sea correcto. En este momento podemos hacer diagnóstico incluso a través de imágenes, con apreciación mucho más cercana de lo que les está pasando a estos niños a través de evaluaciones neuropsicológicas, además de las entrevistas”, dice el doctor Ruedi.

Fármaco para tratar déficit atencional no genera adicción

En el último tiempo distintas voces han cuestionado el uso del medicamento para el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH): el metilfenidato (MFD), más conocido por sus nombres comerciales como Ritalín, Aradix, Metrans o Rubifen, entre otros.

“Desgraciadamente existe un concepto muy equivocado respecto del tratamiento del déficit atencional y esta idea de que los niños están drogados. Eso es absolutamente falso, es inadecuado siquiera presentarlo. Cualquier institución en el mundo en que haya un manejo y un tratamiento de niños con déficit atencional van a avalar el hecho que este medicamento es muy útil para tratar a estos niños”, dice el doctor Patricio Ruedi, neurólogo de Clínica Las Condes.

El problema que ha desvirtuado los beneficios de este fármaco es que a veces el tratamiento está mal usado, mal indicado o mal administrado. Incluso puede ocurrir que el diagnóstico no es el correcto. Lo cierto es que “no es un medicamento que genere adicción”, señala el especialista.

“Es un medicamento que corrigiendo el déficit atencional va a evitar que muchos pacientes con déficit atencional lleguen a ser adictos que es un problema mucho más grave. Un niño con déficit atencional puede llegar a ser un adolescente problemático con trastornos de conductas y en el futuro, ser un adicto a cualquier otra droga ilícita que probablemente va a ser mucho más grave para su vida”, advierte el neurólogo.

El déficit atencional es un trastorno neurobiológico, con un importante componente genético, que se caracteriza por la falta de atención, inquietud e impulsividad en quien lo sufre. Afecta a niños y adolescentes, pero también puede estar presente cuando son adultos.