La llegada de la primavera trae consigo molestos síntomas para muchas personas que sufren alergias estacionales. Durante las próximas semanas, va disminuyendo el polen y las molestias serán provocadas, principalmente, por los pastos.
Según explican desde el Centro de Alergias de Clínica Las Condes “cada primavera, diferentes árboles y pastos liberan sus pólenes generando millones de partículas que se dispersan por el aire, transportadas por el viento. Cuando las personas alérgicas toman contacto con ellas, se pueden desencadenar cuadros respiratorios e incluso cutáneos”.
Nuestros especialistas en inmunología aclaran que “los principales causantes de las alergias de esta época son los pólenes de árboles, principalmente, entre agosto y fines de septiembre, y posteriormente vienen los pastos, desde mediados de septiembre hasta aproximadamente fines de diciembre o principios del verano”.
Por eso, añade, “en esta época del año se agudizan los síntomas de las alergias, como estornudos, picazón y reacciones en piel y ojos”, ocasionados –principalmente- por dos tipos de alergias respiratorias, que son las más frecuentes: las que afectan la nariz (rinitis alérgica) y a los bronquios, como el asma alérgica.
¿Cuáles son los síntomas más frecuentes de la rinitis alérgica?
- Congestión nasal
- Estornudos
- El correr de las secreciones como agua
- Picazón (nariz, ojos, garganta, oídos)
En el caso de los pacientes más alérgicos pueden hacer síntomas bronquiales, como un asma alérgica, con sensación de pecho apretado e, incluso, pueden llegar a tener dificultad respiratoria.
¿Cómo diagnosticar correctamente una alergia respiratoria?
Desde el Centro de Alergias agregan que “una herramienta útil para el diagnóstico inicial es el
Prick test, comúnmente llamado test cutáneo, técnica en la que se ponen gotitas de distintos aeroalérgenos en la piel, se inoculan al interior de la piel y, de esta forma, se puede ver la reactividad y, entonces, diagnosticar adecuadamente la causa de la alergia”.
Respecto de los tratamientos, los más frecuentes son las pastillas antialérgicas y los corticoides nasales, pero en casos más severos hay tratamientos como la inmunoterapia, que consiste en inocular elementos a los que el paciente es alérgico por vía subcutánea y, de esta forma, generar un cambio en la respuesta inmune y curar la alergia respiratoria.
En todo caso, lo más importante es conocer bien el diagnóstico, cuál es la causa que genera la alergia para dar con el tratamiento más adecuado y prevenir o disminuir la aparición de estos síntomas que pueden ser muy molestos. Y tener paciencia, porque la primavera también tiene cosas buenas, no hay que achacarse, sino que buscar ayuda médica para evitar síntomas que, si bien son molestos, generalmente no son graves.