Un consenso realizado por expertos estadounidenses recomienda un nuevo valor para la presión arterial alta, que es sobre 130/80, al implicar un mayor riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular.
El Instituto Nacional de la Salud de Estados Unidos solicitó a la Asociación Americana del Corazón y el Colegio Americano de Cardiología, analizar la evidencia científica existente para actualizar las guías previas, que datan del año 2003 y 2014. Luego de tres años de trabajo, publicaron 106 recomendaciones.
“Lo que cambió sustancialmente es la definición de hipertensión arterial, porque antes se presumía para que una persona fuera declarada hipertensa tenía que tener una presión de 140 o más en la sistólica y/o 90 o más en la diastólica”, señala el doctor Fernando Florenzano, jefe de Cardiología de Clínica Las Condes, con respecto al estudio.
Los expertos estadounidenses recomiendan que se considere hipertensión cuando la presión arterial esté sobre los 130 o más en la sistólica y/o 80 o más en la diastólica. Esto, porque en su análisis de la evidencia vieron que con estos valores existe el doble de riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, que los que tienen una presión arterial normal.
Caterogía |
Sistole |
Diástole |
Presión arterial normal |
<120 mm Hg |
<80 mm Hg |
Presión arterial elevada |
120-129 mm Hg |
<80 mm Hg |
Hipertensión |
Grado 1 |
130-139 mm Hg |
80-89 mm Hg |
Grado 2 |
≥140 mm Hg |
≥90 mm Hg |
¿Qué es la presión arterial?
El corazón es principal motor del cuerpo, que late sin parar para bombear sangre a través de los vasos sanguíneos para el correcto funcionamiento de los órganos. Cada latido, cuando el corazón se contrae, genera presión sistólica. La presión diastólica es la que se puede medir en las arterias, inmediatamente antes de la contracción cardíaca.
La presión arterial es la medición de la fuerza que ejerce la sangre al circular por las arterias y se denomina hipertensión cuando los valores exceden lo recomendable.
El cambio en la clasificación arrojó un aumento sustancial (14%) en la prevalencia de hipertensión arterial en Estados Unidos. Si bien es difícil realizar una extrapolación para la población chilena, si es que se consideran los datos de la última Encuesta Nacional de Salud, en el país existiría un aumento de 28% a 42% de población hipertensa, si se adoptase este nuevo criterio.
Esta nueva definición de hipertensión ha generado debate porque a la mirada de algunos especialistas se estaría medicalizando a la población. El doctor Florenzano explica que el grupo de expertos se preocupó de esto, destacando que es tan importante medir la presión como la estimación del riesgo global de enfermedad cardiovascular (sedentarismo, tabaquismo, obesidad, abuso de alcohol, hipertensión o diabetes). Para esto elaboraron algunas indicaciones:
Hipertensión |
Medición |
Recomendación |
Grado 1 |
Sin factor de riesgo alto |
130 / 80 mm Hg |
No usar fármacos y cambio a estilo de vida saludable. |
Con factor de riesgo alto |
130 / 80 mm Hg |
Uso de medicamentos antihipertensivos. |
Grado 2 |
140 / 80 mm Hg |
Uso de medicamentos antihipertensivos. |
Los expertos aconsejan, medir la presión en duplicado, al menos en dos ocasiones diferentes, para garantizar un diagnóstico eficaz.
El jefe de cardiología de Clínica Las Condes destaca que estas nuevas recomendaciones otorgan claridad sobre el tratamiento de esta nueva población considerada hipertensa, que antes se les denominaba prehipertensos.
“El problema que tenía esto es que la gente no se cuidaba, seguía comiendo, no hacía ejercicio. Entonces, la gente se asusta más si le dices que es hipertensa, ese es uno de los principales mensajes contenido en esta publicación”, señala. Sin embargo, declarar que una persona es hipertensa no equivale a declararla enferma, es sólo clasificarla como sujeto de mayor riesgo.
En la práctica, estas directrices son aplicables solo para Estados Unidos. Sin embargo, el Dr. Florenzano, asegura que el grupo de expertos que realizó este estudio “son los profesionales más competentes que uno pueda pensar para analizar evidencias. Lo que ellos recomienden, hay que ponerles atención”.