Sigue estos consejos para entender cómo reaccionar y reconocer una arritmia.
La mayoría de las
arritmias suelen ser benignas y se presentan con
palpitaciones ocasionales en el corazón. Sin embargo, hay que estar atentos a aquellos tipos de
arritmias que pueden advertir de
patologías cardíacas más graves y que incluso pueden desencadenar una muerte súbita, como la
arritmia ventricular.
Según explica el
Dr. Rodrigo Altamirano, cardiólogo CLC, “este tipo de arritmia es la más grave ya que puede derivar en una muerte súbita.” Sin embargo, reconoce que “la mayoría de los pacientes que consultan por estas
palpitaciones irregulares corresponden a extrasístoles, que son más frecuentes y no necesariamente peligrosas.”
¿Qué es una arritmia?
Según explica el profesional de Clínica Las Condes, una arritmia es un
trastorno relacionado con la frecuencia o el
ritmo del latido cardíaco. Durante una
arritmia, el corazón puede latir demasiado rápido -
taquicardia-, demasiado lento -
bradicardia- o con un ritmo irregular.
Esto se produce cuando los
impulsos eléctricos que coordinan los latidos del corazón no funcionan adecuadamente.
Tips para identificar una arritmia:
- Palpitaciones -siente que su corazón late rápido o irregularmente-.
- Dificultad para respirar.
- Dolor torácico.
- Desmayos.
- Mareo, vértigo.
- Palidez.
- Sudoración.
Arritmia: la señal de que algo puede andar mal
La
arritmia es la expresión de algo subyacente que puede estar ocurriendo en nuestro organismo. Según advierte el cardiólogo, los factores que podrían ocasionar latidos irregulares del corazón son los siguientes:
- Ataque cardíaco actual o cicatrización de un ataque cardíaco anterior.
- Arterias obstruidas en el corazón -enfermedad arterial coronaria-.
- Cambios en la estructura del corazón, como por una miocardiopatía.
- Diabetes.
- Presión arterial alta.
- Infección por COVID-19.
- Glándula tiroides hiperactiva -hipertiroidismo-.
- Apnea del sueño.
- Glándula tiroides hipoactiva -hipotiroidismo-.
- Estrés o ansiedad.
Frente a una
arritmia, lo mejor es consultar con un especialista que a través de diversos exámenes -
holter,
electrocardiograma y/o
ecocardiograma- buscará la causa de estos latidos irregulares. Si se trata de
arritmias benignas -extrasístoles-, existen tratamientos farmacológicos y, en algunos casos, procedimientos como la
ablación, que consiste en eliminar el circuito dañado del corazón a través de radiofrecuencia. Mientras que para los casos más graves -
arritmias ventriculares- existen los llamados dispositivos implantables. El más conocido, es el desfibrilador automático que es capaz de entregar descargas eléctricas a los pacientes de alto riesgo.