Resistencia a la insulina: La pérdida de peso es clave para vencerla
22 de junio, 2017
·Tratamiento y Recuperación
Menor capacidad de acción de la hormona puede desencadenar diabetes.
La
insulina es una hormona producida por el páncreas, que actúa sobre los tejidos para permitir la captación de glucosa por las células y regular la glicemia en sangre. La
resistencia a la insulina es la menor capacidad de acción de esta hormona en tejidos como el músculo, hígado y tejido adiposo, que provoca que el páncreas -para compensar el control glicémico- deba generar una hipersecreción de dicha hormona.
La obesidad, en especial la acumulación de grasa abdominal (o visceral) y la presencia de ácidos grasos libres en sangre, dificulta la captación y utilización de glucosa por los tejidos, aumentando el riesgo de resistencia a la insulina y de diabetes mellitus tipo 2, explica la nutricionista
Margarita del Favero, especialista del Centro de Diabetes de Clínica las Condes.
“Se estima que al momento que las personas son diagnosticadas con diabetes mellitus tipo 2 (DM2), el 80% de ellos tienen exceso de peso”
— Margarita del Favero
De ahí que para combatirlas sea fundamental mantener el
peso adecuado. “La resistencia a la insulina se trata a través de la disminución de peso, alimentación saludable, ejercicio, y en algunas situaciones también con medicamentos”, dice la especialista. Si el paciente sigue un tratamiento adecuado, es probable que sus parámetros de laboratorio se normalicen, sin embargo, si vuelve a los malos hábitos y recupera el peso, estos podrían volver a alterarse. Peor, podría desencadenarse una diabetes.
De acuerdo a la nutricionista, en el tratamiento de la resistencia a la insulina se recomienda:
- Tener una alimentación saludable: reduciendo o eliminando el consumo de azúcar, alimentos elaborados con azúcares y harinas blancas refinadas; y también evitar el consumo de grasas saturadas o grasas de mala calidad.
- Reducir el exceso de peso: es fundamental la pérdida de peso, se recomienda realizarlo junto con el apoyo de un nutricionista para obtener una pérdida de peso saludable y equilibrada según el gasto calórico de cada paciente.
- Realizar ejercicio: permite sensibilizar el músculo a la insulina, disminuir la grasa abdominal y favorecer la pérdida de peso, por lo tanto, este también es un pilar fundamental en el tratamiento, dice la especialista.
- Medicamentos: en algunos casos, los pacientes pueden requerir de medicamentos para mejor control de la resistencia a la insulina. Sin embargo, junto a los medicamentos, la alimentación saludable, pérdida de peso y ejercicio deben ir de la mano.