Conoce los diferentes efectos que causa viajar grandes distancias y los cambios de horario.
Cuando se realizan largas horas de
viaje, sobre todo a países o cuidades que tienen otro
huso horario, surgen
síntomas de
cansancio por la dificultad para conciliar normalmente el
sueño. La
Dra. Evelyn Benavides, neuróloga y especialista en Medicina del Sueño de CLC explica la razón. “El
Jet Lag o
desfase horario, es un
problema temporal del sueño, dura en general 2 a 3 días que puede afectar a cualquier persona que
viaje y pase rápidamente por varios
husos horarios. El cuerpo tiene su propio reloj interno -
ritmos circadianos- que le indica cuándo debe permanecer despierto y cuándo debe dormir. Este desfase se produce porque el organismo está todavía sincronizado con el huso horario original, en lugar de al cuál se ha viajado. Cuantos más cambios haya cruzado, mayor es la probabilidad de que la persona experimente esta patología”.
Los
síntomas que puede presentar una persona a causa del desfase de horario o
Jet Lag son los siguientes:
- Alteración del sueño, como insomnio, despertarse temprano o somnolencia excesiva.
- Fatiga durante el día.
- Dificultad para concentrarse o desenvolverse en comparación a lo habitual.
- Cambios en el hábito intestinal como diarrea o constipación.
- Sensación general de malestar.
- Cambios en el estado de ánimo, irritabilidad.
- Disminución del rendimiento deportivo y académico.
Según la especialista de CLC, estos síntomas son una respuesta del organismo frente a la
desregulación del ciclo del sueño-vigilia a causa de un desfase en la hora de la nueva ubicación. “Esto se produce porque la luz influye en la regulación de la melatonina, una hormona que ayuda a sincronizar las células en todo el organismo, entre ellas las que regulan el apetito y la vigilia”, agrega.
Esta desregulación puede tener diferentes alcances, pudiendo afectar la
concentración y la
funcionalidad en la realización de tareas cotidianas; como el olvido de contraseñas, pérdida de objetos personales, etc. Por otro lado, aumenta el riesgo de sufrir eventos como caídas o accidentes de tránsito. En este sentido, la recomendación es no conducir al menos durante las 48 horas posteriores al
cambio de hora, sobre todo si son más de cuatro
husos horarios.
Recomendaciones para viajeros
La Dra. Benavides entrega los siguientes
consejos para reducir el impacto en la alteración del ritmo circadiano por el cambio en el huso horario.
- Adaptar los horarios de sueño y de comidas desde unos días antes del viaje en función del destino.
- Descansar antes del viaje.
- Hidratarse.
- Evitar el consumo de bebidas alcohólicas y de cafeína antes y durante el vuelo.
- Evitar alimentos que produzcan digestiones pesadas. Y durante el viaje levantarse de vez en cuando y caminar.
- Cambiar la hora del reloj durante el vuelo.
- Evitar la automedicación de pastillas para dormir, ya que puede tener efectos aún mayores en el cambio de horario, produciendo confusión en algunos pacientes y aumentando el riesgo de accidentes.
- Sincronizar las comidas con las del horario local.
- Si se atraviesan más de ocho husos horarios con respecto al original, el cuerpo podría confundir la luz de la mañana temprano con el anochecer y viceversa. Por lo tanto, si son más de ocho husos horarios hacia el este – de Chile a Europa-, lo ideal durante los primeros días es usar lentes de sol y evitar la luz brillante de la mañana, y además, exponerse a la mayor cantidad posible de luz solar hacia el final de la tarde. Si esto ocurre hacia el oeste -Chile a Australia- lo ideal es evitar la luz solar unas horas antes del anochecer durante los primeros días para adaptarte a la hora local.