Esta conducta puede traer serias consecuencias a la salud de los niños.
La
adicción a los videojuegos es una enfermedad que
provoca la necesidad incontrolable de utilizar en forma compulsiva los juegos electrónicos, ya sea en el computador, celular o consolas.
Según explica la doctora Javiera Jofré, neuróloga infantil CLC
, es un tipo de
conducta disfuncional que se caracteriza por ser un patrón de comportamiento recurrente, que
altera la funcionalidad del niño, tanto en los aspectos familiares, sociales y educativos, así como también en otras áreas importantes del funcionamiento.
El exceso de tiempo que se pierde frente a una consola resta oportunidades a otras actividades básicas para el desarrollo como
jugar al aire libre, realizar
actividad física, hacer amigos reales en situaciones no virtuales, leer,
dormir y ayudar en las tareas domésticas, entre otras.
Señales de alerta
El niño adicto presenta conductas disfuncionales, caracterizadas por:
- Incapacidad de controlar el inicio, la frecuencia, intensidad, duración y finalización de la conducta del videojuego.
- Prioriza el juego frente a otras actividades como alimentarse, ir al colegio y hasta dormir.
Además de los cambios de conducta de los niños a causa del exceso de uso de aparatos electrónicos, también hay otros factores que pueden afectar su seguridad: “A través de videojuegos y el uso masivo de
redes sociales, los niños y adolescentes están expuestos a otros riesgos que pueden generar consecuencias traumáticas en su vida
como el grooming -abuso sexual a través de
Internet- y
ciber acoso, entre otros”, agrega la doctora Javiera Jofré.
¿Hay tratamiento?
“Si bien no existe un tratamiento específico, es relevante
establecer límites claros en el uso de pantallas y el tipo de contenido que consumen,
manejar los síntomas conductuales y comorbilidades como trastornos en la línea afectiva y déficit atencional, entre otros. Es importante que los padres detecten a tiempo la adicción, porque en la medida que se profundice, más costará devolver al niño su rutina diaria. El impacto y consecuencias generarán dificultades de las cuales costará reponerse, como
bajo rendimiento escolar o recuperar la
interacción con sus pares”.