Mateo, quién sufría de una malformación pulmonar en su lóbulo izquierdo, ahora puede volver a realizar las actividades de un niño de su edad gracias a esta pionera cirugía mínimamente invasiva realizada por el equipo de CLC.
Las
malformaciones pulmonares en recién nacidos son poco frecuentes y se dan en cerca de uno cada 4.000 nacimientos. Estas anomalías pueden producirse en distintas etapas del desarrollo del feto,
afectando al
tejido pulmonar, la
irrigación arterial, el
drenaje venoso o una combinación de ellos, como era el caso de Mateo Vergara.
Él nació con una
malformación pulmonar de su lóbulo inferior izquierdo. Desde el punto de vista pulmonar, sus condiciones no eran óptimas, pues junto a esto, presentaba una irrigación anómala directamente desde su aorta.
Después de ver a varios especialistas, sus padres decidieron consultar en CLC dada la experiencia y trayectoria del equipo de
cirugía infantil. Tras una evaluación clínica y radiológica rigurosa por parte de un
equipo multidisciplinario, se decidió la cirugía.
El pequeño fue
intervenido para extraer por completo el lóbulo que contenía la malformación.
Dos días después, Mateo ya se encontraba en su casa compartiendo con su familia y realizando sus actividades de manera absolutamente normal.
“Por primera vez, trabajamos con un
equipamiento y
tecnología quirúrgica acorde a las necesidades y tamaño de los
pacientes pediátricos. Estamos contentos con los resultados y la recuperación de Mateo. Clínica Las Condes siempre está utilizando tecnología de punta, para resolver los problemas médicos de los niños, entregando la máxima seguridad, tranquilidad y beneficios posibles. La adquisición de este nuevo instrumental y tecnología específica para nuestros pacientes hará que muchas de las cirugías que realizamos sean de menor duración y con una recuperación más rápida”, explica el equipo de cirugía pediátrica de CLC.