La incidencia del cáncer de ovario es de aproximadamente 5 casos por cada 100.000 habitantes. Los síntomas del cáncer de ovario suelen ser comunes y vagos, lo que dificulta el diagnóstico.
Hay más de 30 tipos diferentes de tumores ováricos, que se clasifican en función del tipo celular. Algunos son benignos (no cancerosos) y no se extienden fuera del ovario. Los tumores malignos (cancerosos) pueden extenderse a otras partes del organismo.
En la actualidad, no existe ningún método eficaz de detección precoz del cáncer de ovario. Los estudios han demostrado que el pronóstico y la supervivencia dependen en gran medida de la cantidad de tumor que queda en el momento de la intervención quirúrgica inicial. Las pacientes sin tumor residual o con nódulos menores de un centímetro de diámetro tienen las mayores probabilidades de curación y supervivencia a largo plazo.
Los tres tipos más frecuentes de cáncer de ovario son:
Los tumores epiteliales aparecen en el epitelio, el tejido que reviste el exterior del ovario. Aproximadamente el 90% de los cánceres de ovario son de este tipo. El riesgo de cáncer epitelial de ovario aumenta con la edad y afecta principalmente a mujeres mayores de 60 años, aunque puede surgir a cualquier edad.
Los tumores de células germinales se originan en las células productoras de óvulos presentes en el ovario. Este tipo de cáncer de ovario puede aparecer en mujeres de cualquier edad, si bien afecta en su mayor parte a adolescentes y adultas jóvenes menores de 30 años. Alrededor del 5% de todos los cánceres de ovario son tumores de células germinales.
Los tumores del estroma de los cordones sexuales se desarrollan en el tejido conjuntivo que mantiene el ovario junto y produce las hormonas femeninas, estrógenos y progesterona. Los tumores del estroma de los cordones sexuales son relativamente raros, de modo que representan alrededor del 5% de todos los cánceres de ovario. Las mujeres pueden percibir un cierto dolor y molestias abdominales en las fases iniciales de la enfermedad.
La mayoría de las mujeres con cáncer de ovario tienen síntomas. Sin embargo, estos síntomas suelen ser vagos y pueden atribuirse a procesos menos graves, como indigestión, aumento de peso o las consecuencias del envejecimiento.
Póngase en contacto con su médico si presenta alguno de los síntomas siguientes: dolor o molestias abdominales generales (gases, indigestión, presión, hinchazón, calambres); flatulencia o sensación de plenitud, incluso después de una comida ligera; náuseas, diarrea, estreñimiento o micción frecuente; pérdida o aumento de peso inexplicado; pérdida de apetito; hemorragia vaginal anómala y cansancio inusual.