Los parásitos intestinales son seres vivos que pueden ser microscópicos -como las amebas o macroscópicos- como algunos gusanos y lombrices.
La mayoría de ellos pueden producir síntomas como incomodidad abdominal, a veces dolor, diarreas de larga evolución, prurito o picazón anal o nasal, o bien no dar síntomas que delaten su presencia.
Estos síntomas no son específicos y pueden confundirse con otras afecciones, como colon irritable y lesiones tumorales benignas o malignas del intestino, entre otras.
Por este motivo, es importante investigar la posible existencia de estas infestaciones mediante la realización de exámenes de laboratorio en deposiciones. El ideal es tomar muestras de deposiciones día por medio, hasta totalizar 6, con una técnica para las formas vegetativas (trofozoitos) y para quistes o huevos. Con este procedimiento se pesquisan la mayoría de los enteroparásitos.
Para el oxiuro o “pidulle” es necesario utilizar la técnica del papel engomado en los márgenes anales, llamado Test de Graham.
Los tratamientos para la amebiasis y giardiasis usan un antibiótico especial durante un período de varios días. Para algunos gusanos o helmintos, la terapia es diferente.
En general, los tratamientos para eliminar estos parásitos son muy efectivos. Se recomienda consultar a un médico para planificar el estudio y tratamiento de un paciente y a veces también de su entorno familiar.
Clínica Las Condes ofrece una completa cobertura para el estudio adecuado de los pacientes y su mejor tratamiento en la actualidad.