Guía de los accidentes en la casa
En el hogar pueden ocurrir una serie de eventos desafortunados. Para evitarlos, es necesario tomar algunas precauciones básicas y ponerle ojo a este "mapa de la casa", para conocer los lugares de riesgo y estar protegido.
De 0 a tres meses
De cuatro a siete meses
De ocho meses a un año
De un año a dos
Desde el momento en que la mamá sale de la maternidad, el niño debe viajar en una silla de auto especial; no en brazos de la mamá ni de un pariente. El niño debe ir en la parte trasera del auto, en su silla correctamente instalada y mirando hacia atrás. Sólo después de un año puede ir mirando hacia delante, pero siempre en el asiento posterior.
En el baño. Dos peligros principales: el primero es que la guagua se hunda; para evitarlo se debe colocar algún dispositivo alto que impida que el niño se sumerja en la tina, y jamás dejarlo solo; el segundo peligro es que la guagua se queme: para evitarlo se debe medir la temperatura con el codo. El agua debe estar alrededor de los 37º.
Los atoramientos y estrangulamientos. Hay que evitar pequeños objetos, como pedazos de un juguete o monedas; bolsas plásticas (nunca dejarlas cerca de la guagua porque se puede adherir a su nariz y boca); chupete con cordón; tiras de algún juego o cortinas cercanas a la cuna.
Evitar incendios, con mecanismos de detección de humo. Idear un plan de evacuación en caso de emergencia.
Posición para dormir. Debe ser de espalda, sin almohada, y en la mitad inferior de la cuna, para evitar que el niño se resbale y quede bajo de las frazadas. Está comprobado que el sueño boca arriba disminuye en un 40 por ciento los casos de muerte súbita y que no se producen ahogos por reflujos.
Mudadores. Desde un recién nacido hasta un niño más grande puede desplazarse por sí solo y caerse. Si al niño no se le mira, aunque sea por un instante, lo más conveniente es dejarlo en el suelo.
Evitar el zamarreo de la guagua. Ello puede provocar una hemorragia cerebral. También se debe asegurar el sostén de la cabeza del niño cuando se lo va a tomar.
Jamás cargar a la guagua en un brazo, mientras con la otra mano se sostiene comida o agua caliente, un cigarrillo, o cualquier cosa que a través de un manoteo de la guagua puede causar una quemadura.
No fumar nunca en presencia de un niño. Primero, por el riesgo de quemarlo y segundo porque la inhalación del humo por parte de un niño es muy tóxico e irritante.
Tener cuidado al calentar la mamadera en el microondas. Puede ocurrir que la leche se sienta fría por fuera y esté muy caliente al centro. Siempre tantear la temperatura de la leche dejando caer unas gotas sobre la mano.
La cuna no debe tener más de seis centímetros entre barrote y barrote para impedir que la guagua pueda sacar la cabeza por entre ese espacio. Tampoco debe tener recovecos de donde se pueda enganchar la ropa del niño. Los barrotes deben ser altos y se debe poner la menor cantidad de cosas dentro de la cuna.
Tener especial cuidado de utilizar “puertas” de niños en escaleras y ventanas para evitar que el niño cruce ciertos límites.
Mucha atención a las quemaduras. El hervidor eléctrico es muy peligroso. El niño puede tirar del cable de electricidad y volcar el aparato sobre su cuerpo; mucho cuidado también al dejar mangos de ollas que sobresalgan a la superficie de la cocina, ojalá se cocine siempre en los quemadores traseros.
Mucho cuidado con dejar remedios y productos químicos al alcance de los niños, siempre deben quedar bien cerrados o con cierre de seguridad.
Evite llevar al niño dentro del carro de supermercado. Si algo le llama la atención, el niño puede tomarlo con fuerza.
Siempre que lleve a su guagua en bicicleta, asegúrese de ponerle un casco.
Mucho cuidado con los enchufes y cables eléctricos. No usar juguetes que deban enchufarse y asegurarse que los enchufes eléctricos tengan seguro de niños.
Jamás dejar al niño dentro del auto solo. Uno, porque mucho rato expuesto al calor es peligroso y segundo, porque el niño ya puede manipular los controles del auto y eventualmente, desengancharlo, o bien, hacerlo andar. Utilizar seguro que evita abrir desde dentro.
Si se tiene armas de fuego, dejarla descargada y separada de las municiones en un lugar seguro.
Empezar a enseñar hábitos de autocuidado como cruzar la calle de la mano, siempre mirando para ambos lados y no acercarse a los perros.
Cuidado con las escaleras mecánicas. A veces los niños se aferran de la huincha que sirve de baranda.