Mi hijo no quiere dejar los pañales
Es habitual encontrar padres desesperados porque no han logrado que sus hijos dejen los pañales. Los especialistas llaman a la calma y a respetar los procesos individuales de cada niño. Además, entregan algunos consejos.
Muchas veces, la presión social lleva a los padres a iniciar antes de tiempo el proceso de que sus hijos dejen los pañales. En el jardín lo exigen o, al cumplir los dos años, todos los familiares comienzan a preguntar cuándo el pequeño dejará de usar pañales.
La doctora Marcela Castellanos, pediatra de Clínica Las Condes, señala: “El inicio del control de esfínteres es muy variable; el niño requiere un desarrollo cognitivo, emocional y fisiológico, que suele aparecer después de los 18 meses de vida, va madurando gradualmente y no suele completarse antes de los tres años y medio. Cada niño tiene su propio proceso de maduración y hay que respetarlo, ya que debe reunir condiciones de madurez que le permitan integrar la capacidad para reconocer su propia necesidad de ir al baño, desplazarse y sacarse parte de su ropa, entre otras habilidades”.
Hay algunas situaciones que pueden gatillar que algunos niños efectivamente no logren controlar esfínteres, a pesar de la perseverancia de los padres. Esto se puede producir, como explica la especialista, por distintas causas: “Por ejemplo, modificaciones en las rutinas del hogar, como cambios de casa, de nana o de cuidadoras, nacimiento de hermanitos; si el niño emocionalmente aún no está preparado para el control de esfínteres, puede retroceder en el proceso de retiro del pañal al vivir una situación de estrés o exigencias”.
¿Cómo actuar?
La doctora Castellanos explica que es importante evaluar si el niño comprende y está cómodo con el lugar donde deberá realizar sus necesidades (pelela o baño), si presenta estreñimiento y dolor al defecar. “Algunos niños también notan gran angustia por parte de los padres o cuidadores, porque no logran controlar esfínteres y lo toman como una forma de manipulación, o simplemente por curiosidad quieren saber qué pasa con los padres si es que no hacen lo que les piden. Por ello es importante demostrar serenidad.
¿Es necesario realizar exámenes?
La pediatra recomienda que, en los casos más complejos, se solicite la ayuda del pediatra y, en algunas ocasiones, la evaluación de otros especialistas, como nefrólogos, urólogos o gastroenterólogos, ya que ellos definirán si es necesario realizar algún estudio o tratamiento especial, como en el caso del estreñimiento, irritaciones locales o infección urinaria.
Cuando existe estreñimiento, se recomiendan las dietas ricas en fibra y con exclusión de algunos alimentos, aumentar la ingesta de agua (sin gas) y, en algunos casos, será necesario realizar exámenes. Según la respuesta, se podría indicar medicamentos u otras acciones.